La desorbitada factura de Meghan Markle en su viaje a Nueva York
La duquesa de Sussex celebró su «baby shower» con un viaje de cinco días a uno de los hoteles más lujosos de la Gran Manzana
Si el romántico gesto que el Príncipe Harry le dedicó a Meghan Markle por San Valentín copó múltiples titulares, debido al uso de un avión privado –que costó 32.000 euros a los contribuyentes–, con objeto de trasladarle de Noruega a Londres para cenar juntos el día de los enamorados, el gasto que ha realizado la duquesa de Sussex durante su viaje a Nueva York está resultando aún más polémico.
Rodeada de amigas, entre las que se encontraban Serena Williams , Amal Clooney , Jessica Mulroney , Abigail Spencer , Gayle King o Lindsay Roth , Meghan no escatimó a la hora de celebrar su baby shower, una tradicional fiesta previa al nacimiento de un bebé. Un arpista profesional, a razón de 550 euros y el resto de «caprichos» para amenizar la celebración no han hecho más que atizar la crispación en ciertos medios británicos, que cifran la escapada de la exactriz a Nueva York en cerca de 500.000 euros.
Por ejemplo, al gasto de 220.000 euros del avión se suma el de los coches privados, que el «Daily Mail» califica como «extremadamente lujosos», y los guardaespaldas que cobraron 12.000 euros por el viaje.
Durante su estancia de cinco días en la Gran Manzana, la duquesa de Sussex se alojó en la suite del hotel The Mark, el más caro del Upper East Side. Una estancia estimada en más de 11.000 euros. Y para las dos última noches en las que se celebró la baby shower, se alquiló su famosa Penthouse Suite –situada en el ático del hotel y de la que se asegura que es la habitación más cara de Estados Unidos–, que cuesta 65.000 euros la noche.
Aunque desde Buckingham Palace aseguran que se trata de un viaje «estrictamente privado», existe resquemor entre los británicos, que no olvidan la carísima boda de 32 millones de euros que la pareja celebró hace poco menos de un año. Un continuo rechazo hacia la duquesa que sus simpatizantes tratan de paliar con mensajes de apoyo, como el que le dedicaron Beyoncé y su marido Jay Z al hacerla protagonista en su agradecimiento por su galardón en los Brit Awards.
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