El motivo por el que Catalina de Cambridge ya no luce su anillo de compromiso
Con la propagación del coronavirus, tanto el Príncipe Guillermo como su esposa han cobrado un papel más relevante dentro de la Familia Real británica
El anillo de compromiso que le regaló el Príncipe Guillermo a Kate Middleton cuando le propuso matrimonio era un enorme zafiro azul de 18 kilates y rodeado de 14 diamantes. Una auténtica joya con leyenda de princesa incluida: era el mismo que lució la difunta Lady Diana Spencer el día de su compromiso con un jovencísimo Príncipe Carlos de Inglaterra .
Tras la muerte de Diana, Guillermo decidió que su futura esposa recibiría su anillo de compromiso. Un gesto significativo, con el que expresaba no solo su amor por su madre sino también cierta audacia. Pero las diferencias entre su relación y la que tuvieron sus padres eran tan palpables que, curiosamente, el zafiro con diamantes las remarcaba a su favor.
En las últimas semanas, la propagación del coronavirus en Reino Unido ha obligado a modificar la agenda de la Familia Real británica. La Reina Isabel II , que cumplirá 94 años el 21 de abril, su esposo el duque de Edimburgo , de 98, y el Príncipe Carlos , de 71, están en el grupo de mayor riesgo debido a su edad, por lo que Guillermo tiene ahora todas las miradas puestas sobre él. Ya desde la salida de su hermano Harry y su familia como miembros de los Windsor, tanto Guillermo como su esposa Catalina de Cambridge han cobrado un papel protagónico que ahora se ve reforzado con la crisis de la pandemia. Y las encuestas así lo confirman.
El pasado 20 de marzo, la duquesa realizó una visita a un centro de emergencias y los fotógrafos oficiales realizaron una serie de instantáneas en las que aparece trabajando en su despacho. Unas imágenes que no han pasado desapercibidas entre la prensa británica que se ha dado cuenta que Catalina de Cambridge no lleva su anillo de compromiso . Según la explicación de los expertos consultados por los medios, para evitar el contagio del coronavirus es recomendable lavarse las manos una media de 8 veces diarias y sin ninguna joya que pueda obstaculizar la limpieza. Unas recomendaciones que la duquesa de Cambridge sigue al pie de la letra.
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