La Princesa monegasca con su hija Alexandra de Hannover y su sobrina Camille, en 2011
La Princesa monegasca con su hija Alexandra de Hannover y su sobrina Camille, en 2011 - AFP
GENTE

Carolina de Mónaco, la Princesa más carismática y elegante cumple 60 años

El relato de su vida se ha escrito de portada en portada. Aún es el árbitro de la moda mundial

Madrid Actualizado: Guardar
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Caroline Louise Marguerite Grimaldi, Princesa de Mónaco, y Duquesa de Brunswick y de Luxemburgo por su matrimonio con Ernesto de Hannover, nació tal día como hoy, 23 de enero, del año 1957. Desde entonces, las cámaras de todo el mundo están pendientes de esta bellísima mujer, que justo cumple 60 años cuando comienza la Semana de la Alta Costura de París. Buena ocasión para recalcar su impacto en la moda.

Vestido de Marc Bohan para Dior en su boda con Pilippe Junot
Vestido de Marc Bohan para Dior en su boda con Pilippe Junot - ABC

Los retratos de Carolina Grimaldi acompañando a sus padres y hermanos, o en los famosos balcones del Palacio Principesco, siempre ocupaban las portadas de las revistas. No en vano, ella ha sido la mujer más fotografiada del mundo, tras Diana de Gales. Desde sus vestidos infantiles a sus peinados, trajes de baño, zapatos, bolsos o pendientes, todo ha sido replicado por sus hordas de admiradoras y por grandes marcas de moda, que han sabido coger el hilo de la cometa guiada por ella.

De joven, era una verdadera fan de los vaqueros, contra las indicaciones de su madre, que creía que debía limitarse su uso. «Mi madre, la Princesa Gracia, no se ha puesto un vaquero en su vida», llegó a decir, si bien esto no es totalmente exacto y existen fotos de Gracia con unos tejanos con vuelta remangada.

También de Dior cuando se casó con Stèfabo Casiraghi
También de Dior cuando se casó con Stèfabo Casiraghi - ABC

Según Carolina, su generación fue la primera en la que las mujeres dejaron de vestir como sus progenitoras, adoptando la moda revolucionaria de los 60. Comentaba en una entrevista que las antiguas reglas del juego de no llevar zapatos blancos en otoño o invierno, combinar bolso y zapatos o ir siempre con guantes y sombrero habían quedado atrás: «Ahora hay otra libertad».

Modelo de Jean Paul Gaultier para el Baile de la Rosa de 2000
Modelo de Jean Paul Gaultier para el Baile de la Rosa de 2000 - ABC

«Estoy contra los dictados de la moda», declaró en abril de 2015 durante el Festival Internacional de Moda y Fotografía de Hyères (Francia), en el que formó parte del jurado que elegía los diez mejores creadores noveles. Para ella, «la moda no se puede disociar de su época y no es nada frívolo ni superficial: vistiéndonos, de una u otra manera, disimulamos defectos y nos expresamos». De hecho, ha sido la misma Carolina la que durante varias décadas ha sentado las tendencias, quizás sin proponérselo.

Kimono y zapatillas en este Chanel Alta Costura, en 2014
Kimono y zapatillas en este Chanel Alta Costura, en 2014 - AFP

La Princesa fue durante años una fiel clienta de Christian Dior. Escogía sus mejores galas en la casa parisina mientras estuvo a cargo de la dirección artística Marc Bohan, su amigo y confidente. De hecho, fue Bohan el responsable de su primer vestido de boda, cuando el 29 de junio de 1978 se celebró su enlace religioso con Philippe Junot en Montecarlo. El 29 de diciembre de 1983 volvió a casarse, esta vez por lo civil, con el italiano Stéfano Casiraghi y también escogió un sencillo vestido cruzado de Dior.

Impecable, de Chanel, en el Baile de la Rosa de 2016
Impecable, de Chanel, en el Baile de la Rosa de 2016 - AFP

Pero una vez que Bohan fue sustituido por Gianfranco Ferré en 1989, Carolina de Mónaco dejó de utilizar sus modelos y comenzó su amistad con Karl Lagerfeld, ya a cargo de la dirección creativa de Chanel. Desde entonces, tantos y tantos vestidos de noche, conjuntos de día e incluso su dos piezas azul claro para la boda con Ernesto de Hannover(1999) han estado a cargo de la maison de la rue Cambon.

Una pieza de día de Alta Costura de Chanel para una boda real en 2010
Una pieza de día de Alta Costura de Chanel para una boda real en 2010 - AFP

No se puede decir que Carolina haya asistido a muchos desfiles en su vida, pero su influencia en cuestiones de moda sigue aún vigente. Solo ella se ha atrevido a llevar con elegancia algún vestido peculiar de Jean Paul Gaultier, como hizo en el Baile de la Rosa en el año 2000, con un modelo con rayas horizontales y plumas. Tampoco dudó ser transgresora cuando, en el baile de 2014, apareció con un conjunto de Chanel de vestido largo y abrigo de estilo kimono, acompañado de unas zapatillas de deporte con cuña creadas por la marca francesa.

Ahora que cumple 60 años, a buen seguro que no dejará de sorprendernos con ese chic intemporal con el se pasea desde que nació.

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