Gil Tamayo, en una imagen de archivo
Gil Tamayo, en una imagen de archivo - ERNESTO AGUDO

Los obispos piden que se respete la libertad de opinión del director antiLGTB del colegio de Alcorcón

El profesor comparó el «dogmatismo» de esta legislación con el «fanatismo terrorista» en una carta enviada a sus alumnos

Madrid Actualizado: Guardar
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El portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), José María Gil Tamayo, ha defendido hoy que la Iglesia pueda tener sus propias convicciones sobre la ideología de género y ha pedido que, una vez superadas todas las inquisiciones, «no pasemos ahora a inquisiciones laicas».

Gil Tamayo ha respondido así a las críticas al director de un colegio concertado de Alcorcón (Madrid) que envió una carta al alumnado en la que arremete contra la Ley madrileña de Protección Integral frente a la LGTBfobia, y compara el «dogmatismo» de esta legislación con el «fanatismo terrorista».

«Hay un ámbito que hay que respetar y es que la Iglesia pueda tener sus propias convicciones en respeto exquisito a la persona», ha defendido el portavoz de la CEE que ha admitido, no obstante, que hay calificativos y formas «que tenemos que cuidar».

«Gracias a Dios hemos superado todas las inquisiciones, no pasemos ahora a inquisiciones laicas», ha dicho.

«Ideología contraria»

Gil Tamayo ha asegurado no conocer todos los detalles de la misiva firmada por el director del colegio de Alcorcón, pero ha recordado que la ideología de género es «absolutamente contraria al pensamiento de la Iglesia que tiene una posición sobre el hombre, sobre el matrimonio y sobre la familia».

Esta posición —ha señalado— la Iglesia «puede, debe y ha de decirla con absoluta libertad y valentía en función del respeto que ella exige para sí misma».

Sobre la condena a 4 años de cárcel para unos activistas que entraron en una iglesia de Mallorca reclamando el aborto libre, Gil Tamayo ha afirmado que fue un atentado a la libertad religiosa y «las personas tienen que responder de sus actos, que tienen unas consecuencias».

«Cuando se atacan los derechos de los demás se exige una respuesta que reponga el daño realizado», ha señalado el portavoz de la CEE, para quien, en una sociedad democrática, la impunidad «no puede ser confundida con una libertad mal entendida».

«Podemos manifestar opiniones y discrepancias, pero la libertad religiosa tiene que ser tutelada por las autoridades y exigida por los ciudadanos», ha afirmado.

En otro orden de cosas, el también secretario general de la CEE ha explicado que durante la reunión de la Comisión Permanente de los obispos se ha abordado la cuestión de las vocaciones sacerdotales, una figura cuya edad media ha superado los 65 años.

Con casi 19.000 sacerdotes y una media de edad que incluso supera los 74 años en algunas diócesis, la CEE es consciente de que «hay que repensar formas de promoción vocacional».

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