Canastas anti-bandas latinas

«Vevo» lleva quince años «enganchando» a dominicanos al baloncesto, una vacuna que les aleja de la calle y les integra

MADRID Actualizado: Guardar
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«Empecé hace 15 años. Una noche me encontré a un muchacho en un bar; estaba solo y tenía una pelota de baloncesto en la mano derecha y una litrona en la izquierda. Le dije que cuántos años tenía y que ambas cosas eran incompatibles. Que si quería jugar, que me trajera a otros chicos», explica Julio César Vargas, conocido como «Vevo».

Dicho y hecho. Días después el muchacho apareció con un nutrido grupo de compatriotas. «Yo les compré la equipación, más balones y así comenzó todo», asegura. Ese «todo» es la Liga Dominicana de Baloncesto de Madrid que él preside. Y lo dice a pie de pista, en el parque de Agustín Rodríguez Sahagún. Está entrenando a jóvenes de dos categorías: de 13 a 15 años y de 15 a 17, en la cancha más nutrida y ruidosa de esta zona verde enclavada en el barrio del Pilar en el distrito de Fuencarral-El Pardo.

«He sacado de la calle a muchos muchachos y he evitado que cayeran en manos de bandas latinas o en la delincuencia. Los primeros grupos, a día de hoy, me siguen llamando "papa"», asegura el técnico, silbato en ristre, sin dejar de dar instrucciones a los chavales que entrena y se reparten entre las dos canastas. Todos le requieren y le llaman a viva voz.

«Utilizamos el deporte como medio de integración; ese es el objetivo principal del baloncesto: que lo vean como un medio y no como un fin. A lo largo de este tiempo he ayudado a reinsertar a jóvenes en la sociedad: se educan en valores, en el esfuerzo y en el trabajo en equipo». Y no le falta razón. «Yo he hecho muchas amistades haciendo deporte y estoy muy contenta», explica Liliany, una adolescente de 13 años», que juega en los puestos de escolta y pivot con la Fundación Bahía. Su objetivo es marcharse con «Vevo» a la Liga Dominicana «porque quiero jugar representando a mi país y sus colores; ahora lo hago con chicas de diversas nacionalidades», explica risueña.

Han ganado siete de los ocho Mundialitos

Equipos femeninos es lo que le falta a «Vevo», este dominicano ágil, rápido y eficaz, que emana simpatía por los cuatro costados y que está muy solicitado. Él entrena sin cobrar un duro, por amor al arte y en su tiempo libre:los lunes y los miércoles por las tardes cuando su trabajo como cocinero y sus tareas como árbitro de la Federación Madrileña de Baloncesto se lo permite.

Por el momento, el míster se ocupa de adiestrar a chicos de las cuatro categorías (11 a 13; 13 a 15; 15 a 17 y de 17 a 21) que aglutinan un total de ocho equipos, el 80% de sus miembros dominicanos. Y lo debe de hacer muy bien, no en vano la Liga Dominicana de Baloncesto se ha alzado con siete de los ocho Mundialitos del Baloncesto.

También participan en los campeonatos de las Juntas Municipales de Deportes y no se pierden ninguna Canasta de Integración en la que participan 18 nacionalidades. La próxima se celebrará en junio y este año estará dedicada a Pepu Hernández, entrenador de la Selección Española.

«Vevo» y sus chicos nunca paran porque participan también en el Torneo de Verano. «Es una forma de aprovechar el tiempo libre. Estoy más centrado en los estudios y he hecho amigos», dice Carlos David, de 16 años, nacido en España y de padres dominicanos.

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