La Marea aprueba su subida de impuestos gracias a los socialistas

El PSOE volvió ayer a ser el socio ideal de la Marea Atlántica en el gobierno municipal coruñés. Como se preveía cuando hace mes y medio presentaron su propuesta inicial de ordenanzas fiscales para 2016, los socialistas serían una vez más la muleta para que el equipo encabezado por Xulio Ferreiro llevase a cabo lo que desde la oposición se calificó como un «impuestazo». Para frenarlo, el grupo del PP llegó incluso a realizar una recogida de firmas en la ciudad. De poco sirvió, ya que el pleno del martes dio luz verde definitiva a la modificación de la carga impositiva a los habitantes herculinos.

La sesión discurrió entre las críticas de todas las fuerzas que conforman la oposición de María Pita.

Desde los populares, la edil Rosa Gallego insistió en afear la subida de la presión fiscal en un momento de recuperación económica en el que otras administraciones han optado por reducirla, así como el hecho de que la Marea «no haya escuchado a nadie» en la elaboración de las ordenanzas, y reprochó incrementos concretos como el de los impuestos a los vehículos. Ante estas acusaciones la responsable de Hacienda, Eugenia Vieito, respondió que se bonificará a «aquellos que sean menos contaminantes», según recoge Ep. Por otra parte, Gallego también señaló la inconveniencia de que la ciudad empiece el año con los presupuestos del ejercicio anterior prorrogados, ya que «dejan a las asociaciones sin saber si van a tener subvenciones o no».

Desde las filas nacionalistas, la concejal Avia Veira lanzó ataques hacia el ejecutivo local por no derogar «la subida del agua» aprobada durante el pasado mandato y por no «revisar» la tasa para el tratamiento de los residuos sólidos urbanos.

A pesar de brindarle su apoyo, también los socialistas criticaron durante el pleno el plan de ordenanzas, de modo que el edil José Manuel García las calificó de «parche» argumentando que «están lejos de lo que la ciudad necesita». Con todo, explicó su voto favorable a las mismas dado que «no existe margen de maniobra».

Cesión en la Lonja

Uno de los puntos más conflictivos de las ordenanzas había sido la subida del IBI a los terrenos portuarios, que se entendía que podría causar un grave daño a las actividades económicas relevantes que allí se desarrollan. Para paliar este efecto, la Marea ha dado marcha atrás y aprobado una alegación relativa a la Lonja, que le permitirá una bonificación de hasta el 50% del gravamen para las labores relacionadas con la extracción, producción y transformación de productos de pesca. En este sentido, desde María Pita apuntan que se pretende beneficiar a «uno de los sectores estratégicos de la ciudad».