Cuatro pymes gallegas testarán un tratamiento contra el cáncer este año

Galchimia, AMSLab, Oncostellae y Nanogap son cuatro pymes gallegas que acumulan experiencia en el ámbito de la biotecnología. Desde hace algún tiempo suman esfuerzos unidas en Neogalfarm, un proyecto financiado por la Consellería de Industria, que se ha propuesto estimular el sector biotech en Galicia. Tras un año de trabajo conjunto y obtener nuevos fondos para avanzar en sus objetivos, sus responsables realizaron ayer balance y expusieron los ambiciosos resultados que confían obtener en los próximos meses. Antes de febrero de 2018, esperan «iniciar ensayos clínicos con al menos un tratamiento anticancerígeno descubierto y desarrollado en el marco de la plataforma», explicó Carme Pampín, CEO de Galchimia que ejerció como portavoz.

Este hito irá acompañado de otros no menos importantes, como «ejecutar al menos cuatro proyectos de descubrimiento de nuevos fármacos; comenzar la fase preclínica regulatoria con al menos dos candidatos desarrollando la mayor parte del proceso en la Comunidad, y establecer acuerdos de licencia con empresas farmacéuticas».

Pampín detalló que «un punto fuerte del consorcio es que ya existen vínculos con diversas empresas de este ámbito que podrían estar interesadas en licenciar uno o varios productos».

Galchimia, con sede en O Pino (La Coruña) y que desde 2001 está especializada en la química orgánica, y Oncostellae, ubicada en el Parque Tecnológico de San Cibrao das Viñas, en Orense, ya venían desarrollando proyectos de investigación en cánceres de próstata y de mama. Nanogap, con una década de trayectoria en el municipio coruñés de Ames, es referente en crear nanomateriales con potenciales efectos antitumorales. Por último, AMSLab, fundada en Lugo hace ocho años, aporta a esta unión sus métodos analíticos.

Objetivos previstos

Ante una enfermedad «tremendamente compleja» como el cáncer, se proponen sumar estrategias y esfuerzos con varios objetivos concretos: desarrollar nuevos antagonistas del receptor de andrógenos; también nuevos moduladores de interacciones proteína-proteína de la familia Bcl-2 «que sean eficaces en modelos animales de cáncer»; descubrir nuevos inhibidores de la quinasa JAK «eficaces en modelos animales de enfermedades mieloproliferativas, hematológicas o de tumores sólidos», y desarrollar nanomateriales «que presenten actividad antitumoral con baja toxicidad y que potencien la acción de medicamentos antitumorales dirigidos contra el ADN». Para alcanzar estos y otros fines adicionales, los investigadores disponen de un presupuesto ligeramente superior al millón de euros del Programa Conecta-Peme de la Xunta.