Arranca el juicio contra la joven que tiró a su bebé a un contenedor tras el parto

En noviembre de 2017, casi dos meses después del parto, la Policía Nacional daba con ella tras una ardua investigación que obligó a los agentes a seguir los pocos rastros dejados por un embarazo que había sido ocultado de principio a fin. Ahora, la acusada se sentará en el banquillo de la Audiencia Provincial de Orense para responder por un delito de intento de asesinato con el agravante de parentesco por el que la Fiscalía solicita quince años y un día de prisión y pena de alejamiento respecto al hijo recién nacido que depositó en un contenedor de basura. La mujer, que en el momento de los hechos contaba 29 años, había parido a escondidas en el cuarto de baño de su domicilio en la ciudad de Orense, envolvió al niño en una cortina y lo introdujo en una bolsa de plastico, la anudó y corrió a tirarla en un contenedor próximo a la vivienda. A continuación, relata el escrito de conclusiones provisionales de la Fiscalía, regresó a su casa y retomó la rutina de aquel domingo, incluso cuando el hallazago del bebé por un transeúnte precipitó el revuelo en el barrio . «La procesada, que (...) es madre de tres hijos y había tenido también otros dos abortos previos, ocultó a todo el mundo su embarazo», expone el Ministerio Público.

El escrito sitúa el momento del parto enre las 15.30 y las 16.00 horas del 17 de septiembre de 2017. La joven, que vivía con su pareja, con un hijo común y con otros dos niños de una relación anterior, expone, «dio a luz en el cuarto de baño de la vivienda, en la que en aquellos momentos no se encontraba nadie más que ella, a un niño al que inmediatamente envolvió con unos trapos, lo metió dentro de una bolsa de basura que ató con varios nudos, bajó a la calle y lo arrojó, con intención de acabar con su vida, en un contenedor de basura muy próximo a su vivienda, a donde regresó inmediatamente, continuando con su vida cotidiana». La hora del parto se ha estimado de acuerdo al momento del hallazgo: al filo de las cuatro de la tarde un hombre sin recursos que inspeccionaba los contenedores en busca de algún resto útil «vio al abrir el contenedor una bolsa grande de color verde, anudada». La abrió «para ver su contenido y al tirar de lo que le parecía una cortina enrollada cayó de su interior el bebé, que comenzó a llorar y al que, junto con otros viandantes, le prestaron los primeros auxilios hasta que fue trasladado al hospital por los servicios de urgencia, hallándose en perfecto estado». La Administración autonómica se hizo cargo de inmediato de la tutela del bebé, que tras un breve paso por el hospital fue entregado a una familia de acogida . El juicio está fijado para este lunes y martes en la Audiencia Provincial de Orense.