Puigdemont ultima su plan para lograr la «disolución» política del PDECat

El expresidente ha alimentado «la Crida» y Junts per Catalunya como alternativas

Carles Puigdemont, junto a la excoordinadora general de PDECat, Marta Pascal EFE

Miquel Vera

Esta funcionalidad es sólo para registrados

A Carles Puigdemont nunca le ha gustado el PDECat . Ahora, parece decidido a liquidar su hasta ahora partido disolviéndolo en un espacio político que le sea de mayor agrado. Con este paso, el expresidente fugado podría dar por finalizado un proceso de distanciamiento que nunca se ha esforzado en esconder y que ha puesto a la antigua Convergència al borde de la escisión en más de una ocasión.

A lo largo de los últimos años, los envites de Puigdemont contra el partido que lo catapultó a la presidencia de la Generalitat en 2016, tras el sonado «paso al lado» de Artur Mas , han sido una constante. Ordenó defenestrar a su coordinadora general, Marta Pascal. También decidió esconder las siglas del PDECat detrás de la plataforma «Junts per Catalunya» para evitar la consolidación de la nueva marca de los nacionalistas catalanes, en plena «refundación» tras conocerse las corruptelas y desmanes protagonizados por Jordi Pujol y CDC durante lustros.

La fórmula que estudia el expresidente para dar por concluida la andadura del PDECat -formación que no se ha presentado nunca a las elecciones bajo esta denominación a pesar de la sucesión de citas electorales vivida desde 2016- es la de la «disolución». Así lo sugirió ayer Antoni Morral, secretario general de «la Crida» -proyecto de partido impulsado por Carles Puigdemont, Quim Torra y Jordi Sànchez-. «Se tendría que plantear que el PDECat se disolviese», aseveró el dirigente nacionalistas en declaraciones a la Agencia Efe.

«la Crida», el plan B

Morral, quien no es militante del PDECat, pidió al entorno nacionalista dejar de lado los intereses «personales y partidarios» en pro del interés común del independentismo. No en vano, en un momento en el que ERC parece haber cerrado por completo el debate sobre las listas «unitarias» del secesionismo que ha exigido reiteradamente Puigdemont, toda la presión del expresidente y sus colaboradores se centra en alinear todo el espacio neoconvergente con las directrices que salgan de Waterloo. Para ello, no se han escatimado esfuerzos en purgar listas y candidaturas del PDECat en una operación encaminada en diluir este partido en el seno de Junts per Catalunya.

Según detalló Morral, los planes de «la Crida Nacional» pasan ahora por reforzar el espacio de Junts per Catalunya para consolidar esta marca como una formación capaz de imponerse en las urnas y hacer efectivo así el «mandato» del referéndum ilegal del 1-O desde una «unidad transversal». Paralelamente, Morral aseguró que la propia «Crida» está trabajando para ganar «musculatura» territorial.

En septiembre, la organización iniciará el proceso de puesta en marcha de sus corrientes ideológicas y para finales de noviembre está prevista la «constitución del consejo de representantes». Una maquinaria que se engrasa lentamente por si «en un momento dado» Puigdemont quiere escindirse definitivamente de su antiguo partido.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación