Silván evita rivalidad con Martínez Majo para liderar el PP de León: «Es mi amigo»

Antonio Silván evitó ayer pronunciarse sobre el congreso provincial de León. «Todavía no está convocado y, en consecuencia, no voy a hablar de ello», resolvió en respuesta a las preguntas de los periodistas. Con el autonómico -que alzó a Presidencia del PP de Castilla y León a Alfonso Fernández Mañueco tras vencerle claramente en las «primarias»- todavía demasiado reciente, el alcalde de León apostó por la prudencia. La salida de Eduardo Fernández del cargo es clara -es incompatible su cargo con el de diputado nacional-, por lo que se impondría un cambio de manos del partido en León, abriéndose así una «carrera» para la que suena con fuerza su nombre y el del presidente de la Diputación, Juan Martínez Majo, tal y como ayer publicó ABC.

No es el momento

No obstante, para Antonio Silván todavía no es el momento de hablar de candidaturas, ni de la suya ni de la de Martínez Majo, que tampoco ha confirmado esta posible aspiración oficialmente, aunque fuentes cercanas al presidente de la Diputación ven claras sus aspiraciones en este sentido. En todo caso, ocurra lo que ocurra, lo que sí que parece seguro es que se apostará por el entendimiento y así lo dejó entrever ayer Silván. «Majo es mi amigo», espetó para zanjar la posibilidad de que exista rivalidad o enfrentamiento entre ambos por la Presidencia del PP de León.

Así, de cara a las próximas semanas -se prevé que el Congreso se celebre el 10 de junio, aunque las fechas están aún por determinar- parece que se impondrá el diálogo y el entendimiento para facilitar el camino al próximo presidente del PP de la provincia. Además de Majo y Silván, otro de los nombres que se barajan para el puesto es el de Ricardo Gavilanes, concejal en la anterior legislatura y con el que no contó Silván cuando fue nombrado alcalde.

De momento, está pendiente una conversación entre ambos políticos para ver quién de los dos debe ser el presidente de la organización. La buena sintonía entre Silván y Majo viene de atrás y, de hecho, desde que ambos ocupan sus respectivos cargos institucionales, la relación entre el Ayuntamiento y la Diputación ha mejorado sustancialmente, al igual que la del propio PP de León.