Accidente mortal en una casa rural de La Iglesuela del Tiétar: fallecen el guardés y un huésped
El suceso ha ocurrido esta mañana por el estallido de un termo de agua eléctrico cuando los dos estaban en el sótano
El guardés y un huésped de una casa rural de La Iglesuela del Tiétar (Toledo) fallecieron esta mañana por el reventón de un termo de agua eléctrico cuando los dos se encontraban en el sótano de la vivienda, según ha confirmado a ABC el alcalde, Víctor Eduardo Elvira. Dos personas resultaron con heridas leves al tratar de socorrer a las dos víctimas mortales, de 54 años y de 38.
«El dueño de la finca me ha comentado que el termo ha reventado cuando el guardés y el huésped estaban en el sótano. El termo que suministraba agua caliente a las habitaciones estaba dando problemas y el cliente se ofreció porque tenía conocimientos de fontanería. Se supone que manipularon algún elemento, lo que causó el reventón que les ha provocado la muerte en el acto. El agua caliente les ha abrasado», ha dicho Elvira.
El suceso ocurrió poco antes de las diez en una de las dos casas rurales de la finca El Tejarejo, situada en el kilómetro 37 de la carretera CL-501 y que linda con Castilla y León. Se trata de un espacio natural de 8 hectáreas en el Valle del Tiétar que se encuentra a diez kilómetros en coche de la pequeña población toledana .
José Manuel Barderas, el empleado de 54 años que ha fallecido, era una persona muy querida entre los 500 habitantes de La Iglesuela. Natural del vecino pueblo abulense de La Adrada, a 13 kilómetros, vivía y trabajaba en la finca desde hace un año y medio junto con su pareja, Esther, quien resultó con lesiones leves al tratar de auxiliar a los fallecidos. Ella y la otra persona herida fueron atendidas por el personal sanitario en la finca y no fue necesario su traslado a un hospital.
El alcalde de La Iglesuela ha sentido la muerte de José Manuel porque era amigo suyo. «En este pequeño nos conocemos todos -ha afirmado- y somos una pequeña gran familia». El Ayuntamiento ha decretado tres días de luto oficial y las banderas ya ondean a media asta desde las doce del mediodía.
El inmueble donde ha sucedido el accidente no ha sufrido daños en su estructura ni en sus exteriores. Es una vivienda de color verde y con siete habitaciones que sus dueños denominan «temática». La otra casa de la finca, con 10 habitaciones, completa las instalaciones, que se anuncian como hotel rural El Tejarejo.
Bomberos de Santa Olalla, Guardia Civil, un médico de urgencias, un helicóptero sanitario, una ambulancia de soporte vital básico y voluntarios de Protección Civil de La Adrada acudieron al aviso.
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