El emprendimiento rural tiene premio

Dulcinea ha sido galardonada en la V Feria Nacional para la repoblación de la España rural con el premio a la Mejor Emprendedora rural 2021 con la nueva fase del proyecto ‘Biofood Network®’

Dulcinea posa con la furgoneta híbrida con la que hacen los repartos a domicilio FOTO; JOSÉ ÁNGEL CARREÑO ORTEGA

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Dulcinea Ortiz (El Toboso, 1979) explica durante su entrevista que todo en la vida es cuestión de prioridades, dependiendo de los valores que tenga cada uno. Ella prefiere comerse un chuletón campero toledano o pagar más por un kilo de tomates ecológicos que ir todas las semanas a la peluquería o comprarse un coche de alta gama. «Prefiero invertir en mi bienestar que en apariencia de cara a los demás».

Esta toboseña, de 42 años, es ingeniera química medioambiental con una amplia experiencia internacional en seguridad de procesos químicos. Sin embargo, tras 15 años en el extranjero trabajando en los puestos más exigentes de diferentes multinacionales y tras una crisis de valores, decidió dar carpetazo a su antigua vida y centrarse en saciar su satisfacción personal.

«El emprendimiento había sido algo que de siempre me llamaba. Tenía ganas de volver a casa y reconectarme con mi tierra. He tenido la suerte de ser dueña de mi propio destino y, económicamente, me podía permitir dar un giro a mi vida. Y eso ha sido un lujo», explica esta autónoma.

Dulcinea regresó a El Toboso aprovechando el programa ‘Retorno de Talento’, puesto en marcha por el Gobierno de Castilla-La Mancha. Llegó con las maletas cargadas de ilusión y su mente puesta en el emprendimiento rural y ecológico. En diciembre de 2018 vio la luz su proyecto ‘ Biofood, Naturalmente® ’, una tienda ‘online’ que ofrece alimentos y productos ecológicos principalmente de proveedores locales y regionales. «La idea era buscar por un lado el comercio ecológico y consciente; y, por otro, apoyar al pequeño productor local o comarcal y centrarnos en las entregas locales, energéticamente eficientes», cuenta.

Los comienzos -recuerda- no fueron nada fáciles. Tuvo que partir de cero no sólo en cuanto a la creación de su empresa, sino también en la búsqueda de clientes. Y ese esfuerzo ha merecido mucho la pena. Ahora ha sido galardonada en la V Feria Nacional para la repoblación de la España rural con el premio a la Mejor Emprendedora rural 2021 con la nueva fase del proyecto ‘ Biofood Network® ’ . «El premio fue una sorpresa enorme porque no me lo esperaba. Había proyectos más consolidados y esta nueva fase es muy incipiente con una idea un poco revolucionaria de cómo hacerlo crecer».

Su iniciativa ganadora se basa en la « colaboración en red » mediante la deslocalización del producto con gente que comparta las mismas prioridades. «La idea es compartir nuestra herramienta ecommerce (o tienda online), crecer en red, para llevársela a cualquier persona interesada en ella. Desde el pequeño productor que quiera canalizar sus ventas directamente, sin tener que pasar por un distribuidor, hasta la madre de familia que busque el autoempleo y sólo quiera trabajar dos días a la semana», explica.

Optimizar el tiempo

«Este modelo de negocio te ayuda mucho a organizarte tu tiempo al ser un comercio por internet. Te damos la herramienta personalizada y, si quieres, puedes tener tu tienda en, por ejemplo, La Puebla de Almoradiel y yo la mía en El Toboso; y trabajaremos en común dentro de un marco ecológico. Ofrecemos un acompañamiento en la gestion del ecommerce, ‘marketing’ en las redes sociales, qué productos funcionan en el mercado, cómo rotan... y tú te beneficias de esta información ahorrandote tiempo, esfuerzo y dinero», argumenta.

«Es una propuesta muy interesante para jóvenes desempleados, asociaciones de productores ecológicos y mujeres emprendedoras»

«La nueva fase del proyecto se basa en la 'colaboración en red' mediante la deslocalización con gente que comparta prioridades»

Las ventajas son para las dos partes. Por un lado, con la digitalización del pequeño productor local y con la del comercio minorista, se aumenta la demanda de la producción ecológica. Y, por otro, la persona emprendedora que inicie su andadura profesional bajo este nombre comercial común y protegido podrá compaginar ese trabajo con otro, ya que, si le rinde con la mitad de tiempo y tiene la mitad de sueldo, puede ser que sea eso lo que alguien necesita y no estar a jornada completa. También existe la opción de tener una tienda física y ‘online’; las posibilidades son múltiples cada uno marca su estilo», afirma.

Y hace un llamamiento a las organizaciones de productores ecológicos de Castilla-La Mancha, asociaciones de mujeres emprendedoras y a jóvenes desempleados: «Para que contacten con nosotros porque tenemos una propuesta muy interesante, accesible, sostenible para todos los bolsillos. En definitiva, un proyecto muy bonito de crear red y ser más fuertes juntos y nos gustaría compartir con todos ellos esta nueva andadura llamada ‘Biofood Network®’».

Alimentación ecológica y productos biológicos

En su tienda, el consumidor puede encontrar todo tipo de alimentos ecológicos. Desde frutas, verduras, hortalizas, legumbres huevos, panadería, arroz, harina, infusiones, cereales, conservas, en definitiva, toda la línea de supermercado básica sin procesar; asi como cervezas, vinos, vermut, licores, leches vegetales, zumos y refrescos, entre otros. Tampoco faltan productos biológicos de cosmética, limpieza de hogar e higiene femenina y de bebé, además de geles y champús solídos y cepillos de dientes compostables «porque -dice- hay muchos de bambú que pensamos que son ecologicos pero las cerdas no se pueden reciclar, nosotros tenemos el único que si es 100% reciclable, las cerdas son de aceite de ricino», puntualiza.

Pero la cadena no termina aquí. Dulcinea reparte todos sus productos y alimentos en su furgoneta híbrida, «la única del pueblo», se lamenta. «Mis valores chocan un poco con los estándares de algunas personas, pero para eso estamos aquí, para ir moldeando hacia donde queremos ir». Y es que confiesa estar muy enamorada de su ‘furgoneta de la manzana’ [apodada así cariñosamente por su logo de manzana en forma de globo terráqueo]. Contamina un 25% menos de CO2 y emite un 75% menos de óxido de nitrógeno. «Propuse al Ayuntamiento hace ya tres años que se incentivara (como hacen otros consistorios, como el Madrid) la compra de este tipo de vehículos con una reducción en el coste del permiso de circulación, pero, de momento, la medida no se ha materializado».».

Con su ‘furgo’, Dulcinea hace repartos a domicilio una vez a la semana por los pueblos de los alrededores de El Toboso, además de por el suroeste y centro de Madrid. Porque ella tiene claro que hará todo lo que esté en sus manos por salvar el medioambiente.

Y echa mano de una frase de Mahatma Gandhi antes de despedirse: «La tierra no es una herencia de nuestros padres, sino un préstamo de nuestros hijos».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación