De jamón hasta el infinito

En España pocas cosas generan tanto consenso como el jamón. Ayer, en la plaza del Ayuntamiento de Toledo, hubo un referéndum y el resultado fue aplastante: miles de personas haciendo cola para comerse su platito de este manjar tan nuestro. A un euro la ración. En realidad, pensaría la gente mientras esperaba al toledano sol de junio para comer, lo de menos fue el récord Guinness.

Aunque, efectivamente, los 392 kilos de este alimento distribuidos en una superficie de 140 metros cuadrados también sirvieron para conformar el plato de jamón cortado a cuchillo más grande del mundo. Lo lograron 76 cortadores venidos de toda España, que estuvieron tres horas trabajando y deshuesaron 112 jamones. El récord llegó a la hora del aperitivo.

El plato pesaba ya más de 300 kilos y, de esta forma, Toledo superaba a Málaga, poseedora de la anterior plusmarca.

Gracias a esta curiosa iniciativa, que tuvo alcance nacional, Toledo se promocionó ayer como cuna del buen yantar, ahora que la ciudad ostenta el honorífico título de Capital Española de la Gastronomía. Los jamones fueron cedidos por la empresa Industrias Cárnicas Tello, de Totanés, y tuvieron el sello del Consorcio de Jamón Serrano.

Batido el récord, se vendieron raciones de este producto al simbólico precio de un euro. Toda la recaudación será donada a entidades benéficas, como Cáritas, el Banco de Alimentos y Mediterranean Challenge. Alfonso Alcázar, director general de Industrias Cárnicas Tello, explicó a Efe que en el caso de que no se vendiese todo el jamón cortado, este se empaquetaría y se donaría a cinco comedores sociales de la ciudad para que fuera consumido.

La alcaldesa, Milagros Tolón, dijo que Toledo «puede presumir» de récord y que esta curiosa actividad se suma a otras muchas que este año se están realizando en la ciudad como consencuencia de la Capitalidad Gastronómica. Una distinción, según Tolón, que supondrá «un antes y un después» para Toledo.

Mientras, Miguel Ángel García, encargado de promoción del Consorcio del Jamón Serrano Español, que agrupa a unas 30 empresas del sector, añadió que el récord es una «gran oportunidad» para difundir el jamón serrano y, en general, la «cultura del jamón» en otros países.

El año pasado, España exportó 39.500 toneladas de este producto, de las cuales más del 60 por ciento fueron a Francia y Alemania. Si se cuenta al resto de los países de la Unión Europea, estos fueron receptores de más del 80 por ciento de las ventas de jamón. Fuera de ella, el principal comprador fue México.