ARTES&LETRAS CASTILLA-LA MANCHA

«Si quisiéramos ganar dinero no pondríamos un negocio de libros»

Entrevista con Alfonso González-Calero, editor de Almud Castilla-La Mancha

Alfonso González-Calero ABC
María José Muñoz

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Almud Ediciones está de celebración. Veinte años sobreviviendo en un sector amenazado por la pérdida de lectores de papel y prácticamente sin ayudas oficiales.

Haber sobrevivido 20 años tal y como está el mundo editorial es todo un logro. ¿Qué le ha animado a seguir?

Pensar que esta región merece mucho más en el ámbito de la cultura y necesita una editorial que deje testimonio de su historia y su cultura.

¿Volvería a crear Almud ahora?

Sí, pero sabiendo de números algo más de lo que sabíamos al principio.

¿Considera que aún existe cierto vacío editorial sobre la historia, arte y literatura de Castilla-La Mancha?

Claro que lo hay. La Universidad apenas edita textos y la Junta hace tiempo que tiene en dique seco su Servicio de Publicaciones. A nivel regional sólo estamos nosotros, y no me alegra decirlo, precisamente. En los niveles provinciales y locales existen buenas iniciativas, pocas, dignas de encomio.

¿Qué criterios de selección utiliza a la hora de publicar?

Que se aporten cosas o enfoques novedosos; si son de literatura, la calidad.

Prácticamente sin ayudas económicas. ¿Cómo sobrevive una editorial como Almud ediciones? ¿Echándole mucho romanticismo?

Bueno, las ayudas oficiales no son muchas, pero a veces existen y salvan muchos proyectos (no todos). Haría falta mucho más apoyo dentro del programa de "ayudas a la edición" de la Junta. Está bien, pero es insuficiente. ¿Romanticismo? Sí, mucho. Si quisiéramos ganar dinero pondríamos un negocio de otro tipo, nunca de libros.

¿Cree que las famosas editoriales han perdido su antiguo prestigio?

Hay algunas editoriales de tamaño medio y pequeño que se esfuerzan mucho y a veces consiguen resultados envidiables. Pero no hay que despreciar a las grandes sólo por serlo, si lo hacen bien.

El mundo editorial se mueve ahora por criterios excesivamente economicistas. ¿Cree que ha decrecido sensiblemente la calidad de las obras?

Hay de todo, se edita mucho y hay cosas buenas y otras que quizá sobren. Pero cada cierto tiempo surgen cosas que merecen ser conocidas, y ahí debemos estar los editores.

Pequeñas editoriales como la suya nos sorprenden a veces con alguna pequeña "joya".

En efecto, las sorpresas suelen venir de los pequeños.

¿Hay futuro para el libro, qué opina de las redes sociales?

Coexistirán el papel y lo digital; a corto plazo no lo imagino de otra forma. Las redes son muy útiles para la difusión de nuestro trabajo; otra cosa es que esa visibilidad luego se transforme en ventas; pero en todo caso, ayudan.

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