Las Coplas a Padilla se volverán a escuchar en Toledo 502 años después en la presentación de 'Comuneros'

La novela del escritor y cineasta Alfonso Domingo será presentada este jueves en un acto en la que participará el exalcalde de Toledo, el abogado Joaquín Sánchez Garrido, a las 19.00 horas, en la biblioteca de Castilla-La Mancha, en el Alcázar

El escritor Alfonso Domingo, junto a la estatua de Juan de Padilla, en Toledo F.G.
Valle Sánchez

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La ciudad de Toledo va a ser testigo este jueves por la tarde de algo excepcional: se van a interpretar en la Biblioteca regional, en el Alcázar, por primera vez en 502 años, las coplas a Padilla, las únicas que han sobrevivido de la época comunera, y que fueron compuestas e impresas en Toledo en la primavera de 1520. Un largo extracto de esas coplas, que se han rescatado de la Biblioteca Nacional, serán interpretadas por Luisa y Cuco Pérez durante el acto de presentación del libro 'Comuneros', publicado por el escritor y cineasta Alfonso Domingo, en el que participará el exalcalde de Toledo, Joaquín Sánchez Garrido .

Toledo está muy presente en los textos de las coplas, que hacen referencia a la ciudad de Toledo, a Padilla, a su ayuntamiento o al Alcázar, al igual que la novela, cuya acción transcurre en esta ciudad, en donde comenzó y acabó el movimiento comunero, y en donde tiene también gran protagonismo María Pacheco, la mujer de Padilla, que mantiene la llama comunera en la ciudad hasta nueve meses después de la derrota de Villalar, según ha explicado a ABC, su autor, Alfonso Domingo, quien destaca que en el libro se publican datos inéditos sobre Toledo y los líderes comuneros y también sobre la guerra de las comunidades. Pero son muchas las presencias y personajes de la novela, creada con una documentación exhaustiva, con conversaciones con los máximos especialistas de la materia y la consulta de una docena de archivos.

El libro aporta detalles que no se habían desarrollado con anterioridad, como el rehén que deja María Pacheco, su propio hijo, para que se cumpla la concordia de la Sisla, el papel del her­mano de Padilla, Gutierre, así como la familia de María Pacheco, fundamental en su huida a Oporto. También el papel de los conversos, la astrología, el ajedrez.

A través de una partida de ajedrez que jue­gan en esos días, se revive y reconstruye la historia de las comunidades, nos remonta a hace 500 años, pero los aspectos de la condición hu­mana, con todos sus matices, siguen siendo semejantes.

«Un momento de la historia, un tiempo de amor y guerra que me apetecía contar. Las relaciones entre Juan de Padilla y su mujer, esa unión que quiere ir más allá de la muerte, son absolutamente fascinantes. El momento de la historia, también. Se puede de­cir que es también una reflexión sobre el poder, nuestro peculiar Juego de tronos », explica su autor.

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