El obispo de Lérida se desdice y ahora proclama la catalanidad de los «bienes de la Franja»

El obispo de Lérida, Salvador Giménez , ha sostenido durante el juicio por los «bienes de la Franja» que la inmensa mayoría de estas obras de arte no son de Aragón, que es una colección que adquirió la Diócesis ilerdense y que, por tanto, no deben ser devueltas en ningún caso al Obispado de Barbastro-Monzón, al que pertencen las 44 parroquias de las que proceden todas esas piezas. Esto es justo lo contrario de lo que Salvador Giménez dijo hace escasos meses, en el fallido acto de conciliación que tuvo lugar antes de este juicio.

El prelado ilerdense no solo se desdice de lo que afirmó en aquel momento sino que, ahora, con su nueva tesis, reniega de lo dispuesto por las sentencias canónicas sobre este asunto y en las que intervinieron los más altos tribunales del Vaticano. Todas esas sentencias dieron la razón a Aragón, indicaron sin ningún género de dudas que las 111 obras de arte que componen los denominados «bienes de la Franja» pertenecen a la Diócesis de Barbastro-Monzón, que en Lérida solo llegaron en calidad de depósito y que, por tanto, al reclamarlas sus legítimos propietarios, deben regresar a las 44 parroquias oscenses de las que un día salieron .

Esas 44 parroquias pertenecieron hasta 1995 a la Diócesis de Lérida, pero aquel año se adecuaron los límites eclesiásticos a los administrativos, y esas parroquias aragonesas pasaron a depender de una diócesis de su propia región, la de Barbastro. En ese momento, las parroquias reclamaron que Lérida les devolviera las piezas, pero el Obispado se negó. En esa negativa también han participado activamente las autoridades políticas catalanas, en particular la Generalitat , que controla el Museo de Lérida, que es donde están esas piezas y de cuyo consorcio forma parte la Diócesis ilerdense.

El radical cambio de criterio del obispo de Lérida, que ayer quedó de manifiesto durante el juicio, lo justifica en que -según dice- han encontrado en los archivos de su Diócesis una documentación que supuestamente demostraría que 83 de esas 111 obras de arte fueron adquiridas por este Obispado hace décadas. Entre esas 83 piezas figuran las más valiosas de esta colección que, en su conjunto, está tasada en más de 8 millones de euros.

E l argumento esgrimido por Salvador Giménez ha sido rebatido este jueves, durante el juicio, por el actual obispo de Barbastro, Ángel Pérez, y por su antecesor en esta prelatura, Alfonso Milián. Ambos coincidieron en que nunca, hasta ahora, había sido exhibida documentación alguna que demostrara lo que sostiene Salvador Giménez. Y eso que ha habido tiempo, porque el litigio arrancó hace 24 años. Además, tanto Pérez como Milián coincidieron en que, hasta ahora, los sucesivos obispos de Lérida asumieron las sentencias canónicas y reconocieron lo que en ellas se hizo constar, que está probado que los «bienes de la Franja» son de Aragón.

El actual obispo de Lérida, sin embargo, apeló ayer a la «ley civil» y, en contra de lo que reiteradamente sentenciaron en firme los tribunales eclesiásticas, ahora sostiene que el caso empieza «de cero» en los juzgados ordinarios.