El texto presentado en el Comité Federal a favor de la abstención a Rajoy apela a la responsabilidad del PSOE

La resolución que ha presentado en el Comité Federal del PSOE la eurodiputada y ex 'número dos' del partido Elena Valenciano, en favor de abstenerse a la investidura de Rajoy y que finalmente se ha impuesto por 139 votos y 96 en contra, apela a la «responsabilidad» que los socialistas han asumido como partido de gobierno mayoritario durante la democracia.

La resolución recoge el mandato al grupo socialista de votar no a la investidura de Mariano Rajoy en la primera votación y de abstenerse en la segunda, con el objetivo de «desbloquear la excepcional situación institucional que sufre el país».

«A nadie se le oculta que no es una decisión fácil, pero tampoco contemplamos el ejercicio de la responsabilidad política, en esta coyuntura ciertamente excepcional, como una carga que nos resulte ajena o incompatible con el papel que hemos venido desempeñando en nuestra democracia constitucional», señala el texto.

Tras incidir en que los socialistas se sienten «responsables del conjunto de la ciudadanía y del país», sostiene que si ejercen ahora de nuevo la responsabilidad de desbloquear la situación política es precisamente por su «condición de fuerza de gobierno que aspira a seguir representando en el futuro a la mayoría social de progreso».

«Nos sentimos responsables, responsables del conjunto de la ciudadanía, responsables del país, porque somos socialistas», recalca la propuesta de los partidarios de la abstención, para los que una nueva repetición de elecciones es el «peor desenlace posible».

A su juicio, unas terceras elecciones serían algo «gravemente dañino para la salud de la democracia», «perjudicial para el interés de España y de los españoles» y tendría «efectos muy negativos para el Partido Socialista, porque apareceríamos ante la sociedad como los principales responsables de un bloqueo que nadie desea». «Un nuevo retroceso electoral nos haría perder la capacidad que ahora tenemos de liderar la oposición y condicionar desde nuestra acción parlamentaria la acción del gobierno y el contenido de las leyes en beneficio de nuestras ideas y de los sectores sociales que más necesitan un socialismo fuerte e influyente», afirma el texto.

La resolución recoge además media docena de «objetivos inaplazables» que el PSOE se compromete a «defender ante el Gobierno y el conjunto de las fuerzas políticas» a través del «decisivo papel» que se ha propuesto desempeñar en el parlamento. Estas son: la derogación de la reforma laboral y de la «ley mordaza», la convocatoria del Pacto de Toledo, la apertura de un diálogo en el Congreso sobre el modelo territorial, la lucha contra la corrupción y un gran pacto de estado contra la Violencia de Género.

«El PSOE realizará desde el primer día una oposición tan firme como constructiva», recoge la resolución, que compromete a los socialistas a "buscar los apoyos necesarios par revisar las políticas antisociales del PP" y al mismo tiempo a «promover activamente el diálogo y el consenso, no solo con el Gobierno, sino con todas las fuerzas políticas, para sacar adelante las grandes reformas que España necesita». «Si ello es siempre necesario, lo es mucho más con un gobierno en minoría y un parlamento políticamente fragmentado», apostilla