Rajoy no tira la toalla, pero ve el pacto con el PSOE casi imposible

Mariano Rajoy no piensa tirar la toalla, aunque sea plenamente consciente de la «enorme dificultad» que tiene alcanzar un pacto con el PSOE en este momento, ya sea para que se abstenga en su investidura o para participar en un Gobierno de coalición, según fuentes de Moncloa consultadas por ABC. «Sabemos que es prácticamente imposible, pero Rajoy está obligado a mantener la oferta hasta el último momento», advierten.

Los plazos están ya muy ajustados, pero el presidente del Gobierno en funciones tiene en reserva la opción de la llamada a Sánchez, y solo le queda esperar el momento oportuno. Hasta ahora, el rechazo contundente del PSOE y de Pedro Sánchez y sus flirteos con Podemos ha frenado sus intentos.

Pero en el entorno de Rajoy cree que el teléfono sonará de aquí a principios de la semana que viene. Según el calendario informal que manejan en Presidencia, el fin de semana del 23 y 24 de abril podría ser el último para negociar, y cualquier acuerdo tendría que estar perfilado el lunes 25. Esa misma semana, si hay pacto tendría que comunicarse al Rey, y a partir de ahí habría que convocar un Pleno con dos posibles votaciones, separadas por 48 horas.

«Un cambio en el PSOE»

En Moncloa se sostiene que la única forma de lograr un diálogo con los socialistas es que «cambie algo en el PSOE, su percepción sobre la situación política, o bien que Sánchez se eche a un lado». De ahí el cambio de estrategia del PP, que está pidiendo al PSOE que desplace a su secretario general para abrir un diálogo con Rajoy.

Desde el Gobierno no se quiere dar una visión «cerrada» del acuerdo que propone Rajoy. Ven dos posibilidades: la abstención del PSOE en una hipotética investidura del candidato del PP, con unos compromisos pactados de legislatura, o bien el apoyo a un Gobierno de coalición, al estilo de los países europeos donde se da esta fórmula. En esa coalición podrían participar dos o tres partidos, y Rajoy está dispuesto a hablar de las «responsabilidades» de cada cual, como ha explicado desde el 21 de diciembre. El pasado 19 de febrero, ya se preguntó a Rajoy en rueda de prensa si estaría dispuesto a ofrecer a Sánchez una vicepresidencia, y el presidente en funciones defendió un Gobierno «que puede ser de coalición o puede funcionar con apoyos parlamentarios», y «todo lo demás es discutible y negociable», advirtió, sin cerrarse en absoluto a ninguna fórmula.

Pero para llegar a ese punto, primero el PSOE tiene que aceptar el diálogo con Rajoy. Si se da ese paso, que sería el crucial, el presidente popular llevará una oferta «generosa», dispuesto a hablar de muchas opciones de colaboración, incluido el «reparto de responsabilidades» en el Ejecutivo. En Moncloa saben que la opción de un Gobierno de coalición es la más difícil.

«No estamos en eso»

El ministro de Justicia en funciones, Rafael Catalá, aseguró que no le consta «en absoluto» que Rajoy vaya a ofrecer una vicepresidencia al líder socialista Pedro Sánchez. «Me parece sorprendente, la verdad. Nosotros no estamos en eso», reconoció durante su intervención en un desayuno informativo organizado por Europa Press. El ministro recordó que desde el día siguiente a las elecciones generales Rajoy tomó la «firme decisión» de promover «un gran acuerdo entre PP, PSOE y Ciudadanos», pero es público el «rechazo absoluto» del líder socialista no ya a un acuerdo, sino simplemente a hablar.