El secretario general del Partido Popular, Teodoro García Egea , no acudirá mañana a la sesión de control del Congreso para medir fuerzas con la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, como pensaba estaba dispuesto a hacer.
La indignación interna ante este plan era creciente, especialmente en la bancada popular donde se temía que el episodio derivara en una fácil humillación pública para los populares y servir una imagen gráfica del bronco enfrentamiento interno. Muchos diputados anticipaban esta mañana a puerta cerrada que no pensaban aplaudir mañana al número dos del PP «dijera lo que dijera» . «Si estamos pidiendo que dimita no podemos aplaudirle», coincidían varios parlamentarios.
La pregunta registrada por García Egea no cambia y seguirá girando en torno a los autónomos pero la realizará el diputado Diego Movellán.
El presidente del PP, Pablo Casado , en cambio, sí mantiene por ahora su plan de medirse mañana con Sánchez . Una posición que también genera rechazo en la bancada popular por el mismo temor que provocaba la intervención de García Egea: que el líder socialista le dé la vuelta a la intervención y en lugar de ser el fiscalizado se convierta en el fiscalizador de Casado.
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