Diplomáticos españoles subrayan que despreciar el Estado de Derecho lleva al desgarro social
La ADE advierte de que las heridas que causa el secesionismo «tardan décadas, si no generaciones, en cicatrizar»
La Asociación de Diplomáticos Españoles (ADE) difundió ayer jueves un comunicado en el que expresan su rechazó al proceso secesionista catalán y subraya que el desprecio al Estado de Derecho conduce a la violencia y al desgarro social. Añaden además que que las heridas causadas «tardan décadas, si no generaciones en cicatrizar».
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La ADE considera la situación que vive nuestro país como de «excepcional gravedad» y llama la atención sobre el hecho de que ninguno de los países de nuestro entorno, con los que compartimos los valores de democracia, Estado de Derecho, respeto a los derechos humanos y pluralismo político, «ha conocido en su historia democrática próxima un caso de subversión del orden constitucional».
Al tiempo que afirman que «no existen atajos en sociedades plenamente democráticas para conseguir objetivos políticos fuera del Estado de Derecho», indican que «no es concebible» un Estado cuyas instituciones y Administración, «en su territorio y en el exterior, no respeten y hagan respetar el orden constitucional y la ley, que en un Estado de Derecho -dicen- es y debe ser igual para todos».
La ADE, a la que pertenecen el 65 por ciento de los diplomáticos españoles, considera que «la ignorancia o desprecio» del Estado de Derecho «sólo conduce a muy graves situaciones de violencia, quebranto económico, desgarro social y alteración de la vida normal, pacífica y en convivencia». Además, los diplomáticos se muestran convencidos de que las heridas que causan este tipo de situaciones «tardan décadas, si no generaciones, en cicatrizar» .
Señala el comunicado que es misión de los diplomáticos contribuir a «la solidez de un marco legal que permita a la sociedad el desarrollo de los objetivos que se marque, en un entorno de seguridad y libertad».
Asimismo, expresa su solidaridad con los servidores públicos que actualmente trabajan en Cataluña «en un entorno especialmente difícil», especialmente los miembros del Poder Judicial, la Policía Nacional y la Guardia Civil, lo que exige de ellos «sus mayores esfuerzos en el cumplimiento de las órdenes que reciben de las autoridades del Estado con un escrupuloso respeto a la ley, a los tratados internacionales vigentes, a los derechos fundamentales como elemento intrínseco de nuestro ordenamiento jurídico, y a los principios de proporcionalidad y adecuación a los objetivos y fines perseguidos».
Por último la ADE termina su comunicado con un «cálido mensaje de apoyo» a la sociedad de Cataluña en el que, en catalán, indica que «toda la red de embajadas y consulados de España en el extranjero es y será vuestra casa».
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