Los barones dan tregua a Sánchez ante el Comité Federal

Ni Mariano Rajoy, ni Felipe González ni la «vieja guardia» de exministros socialistas reunida ayer jueves en Madrid parecen capaces de convencer al PSOE para que deje seguir gobernando a un PP «asediado» por la corrupción. Muy al contrario, la oferta de Rajoy y las palabras de González están teniendo el efecto inverso: barones críticos con Pedro Sánchez se ven forzados a cerrar filas con él en la víspera de una crucial reunión del Comité Federal.

Cita, la de mañana sábado, que se preveía tensa por el intento de los líderes territoriales de cortocircuitar las posibilidades de gobernar con Podemos y los independentistas de ERC y DiL, y que ahora podría derivar en tregua hasta que se aclare el horizonte político; hasta la siguiente cita, en la cual Sánchez ya tendrá que presentar los acuerdos de investidura con Ciudadanos y/o Podemos.

De momento, los militantes no quieren oír hablar de abstenerse en la investidura de Rajoy o cualquier otro candidato del PP porque «el PSOE desaparecería». Lo saben todos los que mandan y, por eso, Sánchez se apresuró el jueves a ser el primero en responder a la «desesperación» de Rajoy y a las recomendaciones de González con un «no rotundo». Ayer, su «número dos», César Luena, remachó la respuesta a González: pactar con el PP sería «una manera de indultarlo» y «blanquear» su corrupción, cuando lo que tiene que hacer es regenerarse en la oposición. Ni Luena ni los presidentes autonómicos que hablaron ayer quisieron desautorizar las «opiniones personales» del expresidente, pero sí dejaron claro que no las comparten.

El no de Susana Díaz

Hasta la más crítica con la deriva en la que cree que el secretario general está embarcando al PSOE, la andaluza Susana Díaz, se vio ayer obligada a navegar entre dos aguas, Sánchez y González, para señalar que no está «ni cerca ni lejos de nadie», pero reconociendo que la posición de los socialistas andaluces sigue siendo que «ni por acción ni por omisión» se apoye al PP.

Precisamente ayer, varias decenas de exministros y exdirigentes socialistas almorzaron en Madrid para denunciar el «suicidio» que cometería el PSOE si se aliara con Podemos, según la carta que han remitido a Ferraz. El exministro del Interior, José Luis Corcuera, fue uno de los organizadores del encuentro en el que participaron el expresidente de Extremadura Juan Carlos Rodríguez Ibarra; el de Madrid Joaquín Leguina; el exministro Carlos Solchaga y el exdiputado Francisco Fernández Marugán. El ex vicesecretario general del PSOE Alfonso Guerra excusó su presencia porque dio una conferencia en Sevilla, donde pidió a Sánchez que «sea sensato, diga la verdad» y anteponga España al PSOE.