Vacaciones «en funciones» antes de pactar el Gobierno

Estaba cantado que la «navideña» fecha de celebración de las XI elecciones generales en España, iba a distorsionar las vacaciones para los ya diputados y senadores electos. Como además, los resultados han arrojado un puzle con piezas descabaladas de difícil encaje institucional, el habitual parón navideño no será tal. Desde luego, para el presidente en funciones, Mariano Rajoy, el descanso será breve. Es habitual que en las dos últimas semanas del año se celebre un solo Consejo de Ministros. El año pasado, Rajoy lo convocó en la semana de Navidad. Sin embargo, en esta ha decidido celebrarlo el martes 29 y dar vacaciones a unos ministros que, desde que ayer lo publicó el BOE, también están en funciones como él.

En Moncloa aseguran que «en principio se queda en Madrid». Si el año anterior, la salud de su padre, a punto de cumplir 95 años, le obligó a permanecer en la capital, este año las negociaciones para formar Gobierno no le permitirán mayores alegrías. Ayer almorzó con los presidentes de las principales instituciones del Estado antes de volver a Moncloa donde se reunió con su equipo más cercano para perfilar los pasos a seguir en los próximos días antes de la constitución de las Cortes y la ronda de consultas del Rey.

El propio Rajoy declaró a ABC durante la campaña que «estas Navidades serán atípicas porque hay mucha tarea institucional por hacer». Descartó asimismo volver al Palacio de Doñana, donde ya durmió un par de noches recientemente: «Es que a mis hijos no les gusta mucho ir porque se sienten aislados y no tienen amigos con los que divertirse. A mí si me gusta es por pasear por la playa». Nadie se atreve a confirmar en su entorno si coincidiendo con el fin de año viajará a Pontevedra donde el año pasado disfrutó de unos días. «Allí sí –confesó el presidente– la familia se siente como en casa. Además comemos y cenamos con la familia y amigos y disfrutamos de nuestra tierra».

Aunque un Gobierno en funciones no debe tomar decisiones extraordinarias, fuentes del Ejecutivo recuerdan que una de las obligaciones que tiene el Consejo del día 29 será aprobar la cuantía del salario mínimo interprofesional.

Está previsto que la cena de Nochebuena la celebre Rajoy en Moncloa con su mujer, hijos, padre y hermanos. Son días, con las limitaciones de la tensión política actual, «para disfrutar de mi padre que, aunque está muy bien de salud en general, tiene achaques ya importantes. Nos gusta ver deporte a mis hijos, a mi padre y a mí, y estos días intentaremos aprovechar para pasar tiempo juntos».

Sin embargo, una vez pasadas las fechas más señaladas, Mariano Rajoy empezará a tomar contacto con otros líderes, pendiente de si consigue la abstención de Ciudadanos (ya comprometida por Rivera) y del PSOE para repetir como jefe del Ejecutivo. Ayer mismo, apuntaron en su entorno, recibió un mensaje de Pablo Iglesias donde el líder de Podemos le trasladaba sus propuestas para reformar el Estado. Rajoy le contestó remitiéndole a una próxima reunión o conversación que ambos podrían celebrar en plenas vacaciones.

Por ello, Iglesias tampoco tiene previsto hacer grandes desplazamientos en los próximos días. De hecho, fuentes cercanas al líder de Podemos sostienen que pasará la mayor parte de los días en Madrid, con alguna salida «si puede» a su casa ecológica de Casavieja (Ávila), qu e disfruta de su propio depósito de agua y abastecimientoo con placas solares. Una de las personas que le podría acompañar es Irene Montero, la jefa de su Gabinete con la que le relacionan desde que se separó de la ya parlamentaria, Tania Sánchez. No obstante, a los dirigentes de la formación morada les ha pedido «que se queden cerca» porque no descarta que tenga que tener algún contacto, aunque sea discreto, con alguno de los otros líderes durante estas Navidades. En su casa de Vallecas ha puesto el árbol «como hace siempre», según reconoce.

Comité en plenas navidades

Pozuelo de Alarcón, donde vive, será el lugar «de descanso», junto a la sede socialista de Ferraz, para Pedro Sánchez, convertido en el centro de atención política desde el domingo. Aunque intentará «cuadrar alguna fecha» para marcharse con su familia, «no lo tiene nada fácil», apunta un dirigente del PSOE. De hecho, el propio diputado electo ha convocado el comité federal socialista el próximo sábado para asegurarse renovar su candidatura a la Secretaría General. Por sorpresa, Sánchez citó a los altos cargos de su formación en un fin de semana que muchos se había reservado «para descansar».

Antes de las elecciones y de conocer el endiablado panorama para lograr una mayoría de Gobierno, sus compañeros le habían escuchado hablar con ilusión del viaje al Pirineo que ya hizo en las pasadas navidades y también en Semana Santa, a la estación de Cerler donde él y su mujer, Begoña Fernández, disfrutaron del deporte del esquí. «No es fácil que puedan repetir esa salida, aunque nada es descartable», comentan en Ferraz.

Finalmente, el líder del cuarto partido en votos, Albert Rivera, vivirá las Navidades entre Madrid y Barcelona. En esta su ciudad natal y donde sigue residiendo su familia, vive su hija Daniela, fruto de su relación con su expareja Mariona. Con el teléfono siempre cargado por si le llaman Rajoy o Sánchez para pedirle su apoyo en una hipotética investidura, el responsable de Ciudadanos piensa disfrutar de sus días de descanso con su actual mujer, Beatriz Tajuelo, quien se ha convertido en uno de sus grandes apoyos en campaña y, ahora, tras el incierto 20-D.