Trabajar codo con codo con tu bebé

Dar los primeros pasitos de un negocio nunca es tarea sencilla. Hacerlo intentando disfrutar al máximo de la aventura de la paternidad es una labor heroica. Para enfrentarse a esa misión casi imposible del progenitor emprendedor, en algunos países europeos se ha consolidado el modelo del "coworking" que admite niños. Los espacios de oficinas en los que autónomos y pequeños empresarios comparten infraestructura, experiencias y oportunidades comienzan a asentarse en nuestro país, pero la idea de ampliar o adaptar su infraestructura a los más pequeños está aún muy en pañales.

Una propuesta pionera es la de "Campus for Moms & Dads", un programa organizado por Google for Entrepreneurs dentro del espacio de Campus Madrid para ayudar a madres y padres emprendedores a impulsar sus negocios en un horario compatible con la vida familiar.

"Muchas de las actividades del entorno de Campus Madrid se realizan en horarios complicados para personas con compromisos familiares. Por eso el concepto de este programa es crear una comunidad para todos estos emprendedores que tienen bebés. Ya funcionó muy bien en nuestros campus de Tel Aviv y de Londres, y aquí también", explica Rufo de la Rosa, el "program manager" de Campus Madrid. "Vamos por la tercera edición. Nos reunimos una vez al mes durante cuatro horas para dar contenidos que los participantes, que oscilan entre las 40 y las 60 personas, nos solicitan. Los asistentes puede venir acompañados de sus bebés. De hecho, acondicionamos el espacio para que puedan jugar y en la próxima sesión ya tenemos previsto que una niñera cuide de ellos para que los padres puedan atender mejor", asegura De la Rosa. "El objetivo es que los participantes poco a poco vayan apareciendo más por nuestra comunidad y se vayan integrando en otro tipo de actividades, que esos padres y esas madres puedan venir con su bebé a cualquier actividad que organicemos, y es algo que estamos consiguiendo", añade.

Aunque son excepción, hay otros espacios de "coworking" que también permiten la entrada de niños. Es el caso de Working Space, un pequeño local de Alcobendas (Madrid), que admite incluso mascotas. "No tenemos guardería, pero pretendemos que la gente sienta este espacio como algo suyo y por eso nos parece normal que un niño pueda venir cada vez que sea necesario a pasar un rato con su papá o su mamá", explica su dueño, Manuel Zea.

El Valkiria Hub Space de Barcelona ofreció durante un tiempo un servicio bajo demanda de "cobaby", un espacio en el que los emprendedores podían dejar a sus hijos en manos de cuidadoras mientras trabajaban en salas contiguas. Ahora esa posibilidad ha sido sutituida por otra similar fuera de las instalaciones, gracias a un acuerdo con una guardería cercana, y con coste reducido. "La conciliación es uno de nuestros valores. Evitamos el aislamiento que provoca trabajar desde casa cuando se es madre o padre a la vez que se elimina el problema del sobregasto. Por el precio de una guardería, se dispone de un espacio de coworking para relacionarse con otros profesionales", explican desde Valkiria.

Embrionaria aún en España, la posibilidad de ver crecer tu hijo y tu negocio al mismo tiempo no tiene precio.