La siderurgia española teme que los aranceles en EE.UU. inunden de acero la UE
El consumo de acero en nuestro país aumentó un 4,1% entre enero y abril, hasta los 1,2 millones de toneladas
La patronal siderúrgica Unesid ha mostrado hoy su preocupación por la «reacción» con que la UE vaya a responder a los países de fuera de la Unión que van a buscar en Europa un mercado alternativo a EE.UU. para su acero tras la imposición de ese país de aranceles a las importaciones.
El presidente de Unesid, Bernardo Velázquez, ha señalado hoy en una rueda de prensa que para España el impacto de los aranceles que ha puesto EE.UU. a las importaciones de acero no le afectan en un primer momento de forma significativa y directa, pues solo exporta un 3,8 % de su producción a ese país.
No obstante, ha señalado que a Unesid le preocupa la reacción de la UE a los países que ahora dirigen gran parte de sus exportaciones a Estados Unidos y que van a buscar mercados alternativos.
Velázquez, que ha dicho que en estos momentos la UE es el mercado libre más grande del mundo , ha explicado que Unesid está trabajando para que desde la UE se impongan medidas de salvaguardia a las importaciones que hoy no están definidas.
En este sentido, el director general de Unesid, Andrés Barceló ha señalado que la idea que tienen es que la Comisión Europea (CE) va a replicar las medidas de salvaguardia que impuso en 2002, que consistían en establecer un contingente arancelario.
Ha señalado que, en función de esa fórmula, se tomaría la media de importaciones en un periodo (en 2002 fue una media de tres años), de forma que las exportaciones de terceros países que estén dentro de esa media puedan pasar sin ningún problema, mientras que a las que la excedan se les aplicaría un arancel.
Bernardo Velázquez ha manifestado que el objetivo de la CE «no es evitar las importaciones, sino evitar que crezcan desmesuradamente» .
Por otra parte, añadir que el consumo de acero en España ha aumentado un 4,1% en el periodo entre enero y abril, hasta los 1,2 millones de toneladas, y mantiene el impulso de 2017, año en el que cerró con un incremento del 8% gracias al repunte de la actividad en la construcción.
En cuanto a la producción, en el periodo de enero a mayo ha subido un 1,5% , hasta los 6,2 millones de toneladas, y las entregas un 9%, hasta los 6,35 millones de toneladas. Ya en 2017 la producción fue un 5,7% superior a la del año anterior y las entregas crecieron un 7,4%.
En cuanto a las exportaciones, entre enero y abril del presente año las exportaciones de productos siderúrgicos y de primera transformación han aumentado un 4,7%, hasta los 2,94 millones de toneladas, gracias al incremento de las ventas a Europa, que han mejorado un 7,3%, mientras que en el resto de países se han mantenido estables.
Sin embargo, las exportaciones a EE.UU. han empezado a caer en febrero, con lo que acumulan un descenso del 20,5% en los cuatro primeros meses del año, incluso antes de haberse comenzado a aplicar los nuevos aranceles. Ya el año pasado las exportaciones de acero cayeron por cuarto año consecutivo, mientras que las importaciones subieron un 5%, si bien el saldo comercial se mantuvo positivo en 187 millones de euros, gracias al valor añadido de los productos exportados.
No obstante, Bernardo Velázquez ha indicado que 2017 puede ser probablemente el último año en que España sea un país netamente exportador y pase a ser importador.
Por lo que respecta al año en curso, las toneladas importadas han crecido un 1,5% , hasta los 3,6 millones, entre enero y abril de 2018, y, según Unesid, su evolución próxima dependerá del impacto que tenga en los mercados mundiales la nueva situación creada por la Administración norteamericana.
Velázquez ha dicho que la mejor noticia para el sector es que «la construcción ha vuelto» y está impulsando el consumo de acero, y en cuanto al consumo de bienes de equipo ha señalado que la demanda debería verse impulsada por inversiones públicas y privadas, para lo cual hay que solucionar «incertidumbres» en la vida política y económica del país.
Bernardo Velázquez y Andrés Barceló también se han referido al papel de la industria siderúrgica en la denominada economía circular , con la que están «encantados» y quieren que se desarrolle más, pues han sido «pioneros» en ella, ya que el acero se recicla en su totalidad y prácticamente hasta el infinito, informa Efe.
