Jorge Lasheras: «La prioridad de las empresas japonesas no pasa por España»

El presidente del Círculo Empresarial Japón España (CEJE) cree que el país asiático saldrá más beneficiado del acuerdo comercial firmado con la UE

Jorge Lasheras, presidente del Círculo Empresarial Japón España ABC

Daniel Caballero

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Jorge Lasheras conoce de primera mano cómo es operar con el tejido empresarial japonés. Fue presidente de Yamaha en nuestro país durante 22 años y ahora sirve como nexo de encuentro para las compañías de ambas regiones a través del Círculo Empresarial Japón España (CEJE) ; para estrechar lazos productivos. De momento, las relaciones comerciales e inversoras entre países caminan a un ritmo sosegado e incluso negativo en ciertos aspectos, aunque ahora con el nuevo acuerdo UE-Japón confían en relanzar los puntos de unión.

¿En qué punto están las relaciones de España con Japón?

En crecimiento. Las exportaciones se han duplicado en los últimos ocho años. Pero nosotros representamos un porcentaje pequeño en las suyas. Es bueno duplicar y que haya unas 9.000 empresas españolas que exportan regularmente pero tenemos un reto: España no se merece solo un 0,5% del total de exportaciones a Japón.

Pese a haber aumentado las relaciones comerciales, ¿cómo hacer para que estas lleguen a los niveles del resto de la Unión Europea?

No hay una solución milagrosa . Solo constancia y paciencia. Tiene que haber más empresas que acepten ese reto. Es complicado establecerse allí porque el mercado es difícil, hay normativas especiales y los consumidores japoneses son muy sofisticados; si ven que tu producto cae en calidad, te echan. Cuando vas al mercado japonés, los primeros años no logras gran cosa, te puedes desanimar por el camino, pero hay que insistir; las compañías de éxito que conocemos cuentan todos la misma historia. También es fundamental la firma del acuerdo comercial de la Unión Europea con Japón.

¿Cómo sortear las trabas para establecerse en el país asiático?

Fácil no es, pero esto ya lo han entendido las empresas españolas. Lo que aconseja el sentido común es buscar un aliado local (un «partner», formando una «joint-venture» ) que te lleve por los recovecos de las normativas, que haga ese trabajo.

En otros países de la UE ya exportan a Japón más de lo que importan. En España esta tendencia no se ha producido. ¿Cómo se puede invertir la balanza comercial?

Si la balanza comercial es negativa pero las importaciones ayudan al desarrollo de la economía, no lo veo tan mal. Pero es bueno alcanzar un equilibrio. Las relaciones tienen que crecer pero los japoneses salieron antes hacia Europa que nosotros hacia allí. Tenemos que recuperar ese terreno perdido .

En cuanto a sus inversiones en España, van en caída libre desde 2016. El año anterior, aún sin datos oficiales, se esperan menos de 100 millones, cuando hace dos ejercicios la cifra era de más de 500 millones. ¿Japón ha dejado de tener interés?

Las prioridades de la inversión japonesa en Europa son otras. Han invertido mucho pero, sorpresivamente, en Reino Unido. Allí hay grandes fábricas de automoción, por ejemplo, que requieren mucha inversión. La UE supone más de una tercera parte de su inversión exterior; un 30% , Estados Unidos ; y sobre un 20%, Asia . Europa es muy importante; si de ese gran flujo viene tan poco a España, la impresión es que las prioridades de las empresas van por otro camino, lo cual me lleva a decir que lo que tenemos que hacer es volver a hacer un esfuerzo para potenciar el buen trabajo de las empresas japonesas que están aquí; y que vendamos y hagamos un esfuerzo para vender España a la comunidad empresarial japonesa como un país atractivo en el que se puede ganar dinero.

¿Por qué no está España en sus prioridades? ¿O es nuestro país quien les desdeña?

No les desdeñamos en absoluto, sino al revés. Pero eso no se traduce en un interés persistente. Necesitamos trabajar en vendernos , en mostrar que el país funciona y que hay empresas que lo hacen muy bien.

Reino Unido acapara gran parte de la inversión en la UE. Tras el Brexit, ¿se le abre una oportunidad a España?

Requiere un plan mucho más profundo y a largo plazo. En cualquier caso, con Brexit o sin él, en España el mundo empresarial hemos de hacer una labor de promoción e intensificar esto para que el país esté siempre considerado entre los intereses y prioridades de las empresas japonesas. Como no sabemos si habrá Brexit, mejor callarnos.

El acuerdo comercial de la UE con Japón abre la puerta a ambos mercados y sus empresas. ¿Se puede cuantificar su impacto en el caso de España?

Es muy complicado, requiere de mucho estudio. Aunque lo que puede ocurrir es que se ahorren más ellos que nosotros.

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