El favorable momento del consumo, que se traduce en más compras de coches, también impacta en forma de buenas noticias para Hacienda. El impuesto de Matriculaciones, que grava más a los coches más contaminantes, elevó su recaudación un 4,6% hasta abril para llegar a los 129,5 millones de euros .
¿Por qué no crecen los ingresos del tributo al mismo ritmo? Porque cada vez se compran más coches con menores emisiones de dióxido de carbono, lo que reduce los tributos a pagar. De media, cada coche nuevo pagó en el arranque del año 267 euros al Fisco, mientras que en 2015, a estas alturas, la cuota era mayor, de 302 euros.
La compra de coches más baratos y que el parqué de automoviles cada vez cuente con modelos más ecológicos, de menores emisiones de dióxido de carbono , ha provocado que año a año los ingresos por este concepto hayan ido menguando.
La reforma del impuesto, que hasta 2008 gravaba la cilindrada y no tanto las emisiones, también redujo los ingresos de los casi 2.000 millones de 2007 a los 305 millones de 2015 .
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión