España, en superávit exterior pese al desplome del turismo

La economía muestra una competitividad mayor que en la anterior crisis y lleva 28 meses seguidos con precios menores a la Eurozona

Carguero en el Puerto de Algeciras SERGIO RODRÍGUEZ

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Las cifras de cierre del PIB de 2020 plasman a la perfección, por un lado, la extrema gravedad de una crisis económica que no tiene precedentes. Pero al mismo tiempo también ofrecen datos que indican que la economía española está mejor preparada para las turbulencias de lo que demostró en la anterior crisis financiera. Las reformas y la corrección de desequilibrios macroeconómicos antes latentes bajo la superficie explican este comportamiento. Todo ello en un contexto en el que el PIB se desplomó en 2020 un 11%, máxima caída desde la Guerra Civil, ante el desplome del gran motor económico, el turismo, que en un solo año retrocedió más de medio siglo a niveles de visitantes que no se alcanzaban desde 1969. Un bajón del 77% que, pese a todo, ha visto cómo España encadenaba por noveno año consecutivo superávit de financiación frente al exterior. Esta situación es inédita y explica el cambio que ha experimentado la economía española en la última década .

Así lo refleja la balanza por cuenta corriente, que mide el intercambio de bienes, servicios y rentas con el resto del mundo. Al sumarle la balanza de capital, alcanzó en noviembre los 10.461 millones de euros de financiación frente al resto del mundo, un 61% menos que un año antes según el Banco de España. Pese a ello, es un nivel de superávit exterior sorprendente dado el hundimiento del turismo y sin el gasto de los más de 60 millones de visitantes que perdió España en 2020.

Nuestro país sale de 2020, además, con un menor déficit comercial , al reducirse un 58,7%, hasta los 29.885 millones, pese a que las ventas al exterior se redujeron un 10,9%, las compras lo hicieron más, un 15,7%. «Las exportaciones de bienes, que no de servicios, han aguantado bastante bien. Pero debemos tener en cuenta que la cuenta corriente es la diferencia entre ahorro e inversión . Si no hay diferencia entre lo que ahorras y lo que inviertes, tienes equilibrio y no te endeudas con el resto del mundo. Lo que ha podido pasar es que las familias han compensado con su ahorro el déficit que han tenido las administraciones públicas , que han triplicado su déficit», sostiene el economista jefe para España de BBVA Research, Miguel Cardoso..

A ello se le une que desde septiembre de 2018, España ha acumulado 28 meses con diferencial negativo de precios frente a la Eurozona, una ganancia de competitividad que se mantuvo en enero cuando el IPC marcó un 0,6% interanual, tres décimas menos al del resto de los estados de la moneda común.

«No tenemos burbuja en ningún sector y el nivel de endeudamiento de familias y empresas se ha reducido mucho. Sí hay bastante consenso en que la reforma laboral ha tenido que tener un peso importante en la competitividad. Eso sí, hasta que no acaben los ERTE no sabremos el impacto en el empleo de la caída en el PIB», zanja la economista de Funcas, María Jesús Fernández

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación