Bankia pide cuatro años de cárcel para Blesa y tres para Rato como responsables de entregar las tarjetas B

Bankia, parte en la causa de las llamadas «tarjetas black», solicita cuatro años de prisión para Miguel Blesa, expresidente de Caja Madrid, y tres años para Rodrigo Rato, quien estuvo al frente de Bankia entre 2010 y 2012. La entidad financiera considera a ambos banqueros los responsables de la emisión y entrega de las tarjetas opacas, con las que 83 ex altos cargos gastaron 15,5 millones de euros sin control y de espaldas al Fisco.

En su escrito de acusación, al que ha accedido ABC, la entidad financiera pide la apertura de juicio oral como acusados contra Blesa y Rato y otros 52 consejeros y directivos de las dos entidades que utilizaron las Visas para gastos personales ajenos a sus funciones.

Para otros diez directivos, Bankia pide que sean juzgados como posibles responsables civiles del dinero que se gastaron.

El abogado de la entidad, quien impulsó esta causa al descubrir las tarjetas opacas en una investigación interna, concluye que las tarjetas son ilegales porque fueron «emitidas al margen del circuito ordinario de otorgamiento de tarjetas de empresa» y que no formaban parte de los sistemas de retribución de los consejeros, como alegaron muchos de ellos en los interrogatorios ante el juez.

Bankia hace una distinción respecto a los directivos de Caja Madrid y Bankia que utilizaron las tarjetas B pero no pertenecían a los órganos de control de la entidad (ni consejo de administración ni comisión de control), al considerar que ellos podían haber entendido que las tarjetas formaban parte de sus sistemas de retribución.

Así, pide dos años de cárcel para otros consejeros como Estanislao Rodríguez-Ponga, el sindicalista José Antonio Moral Santín, el expresidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán; y un año y seis meses de cárcel para José Manuel Fernández Norniella.