MotoGP

Pol Espargaró: «Marc nos deja cojos; sin él la evolución es más lenta»

Compañero de equipo de Marc Márquez y hermano de Aleix, uno de sus enemigos. El piloto atiende a ABC

Marc Márquez, operado con éxito del brazo

Pol Espargaró comenta con sus mecánicos la carrera ABC

Sergi Font

La lesión de Marc Márquez carga a Pol Espargaró (Granollers, 10 de junio de 1991), su compañero, con toda la responsabilidad en una temporada en la que las Honda están sufriendo excesivos problemas. Y su hermano, Aleix, despunta, en Aprilia.

—¿La lesión de Márquez le traslada más presión?

—Ni pone ni quita. Es una situación compleja para el equipo y para mí porque nos deja cojos. Sin Marc en el equipo, la evolución es más lenta, tienes menos información de un piloto rápido y puntero como Marc, con la experiencia que tiene. Así que perdemos todos.

—Pero antes se repartían las miradas, ahora toda la atención recae sobre usted.

—Los dos tenemos la presión de hacerlo lo mejor posible. Eso independientemente de si un piloto está o no. La presión tiene que estar dada por el equipo, por dónde estás, por competir en Repsol Honda… Solo por eso tienes que tener la máxima presión y querer los mejores resultados. Es evidente que sin Marc recae un poquito más sobre mí pero aún así voy a afrontar el fin de semana como si fuera un fin de semana completamente normal.

—¿Montmeló, su casa, es el mejor sitio para volver a empezar?

—Si fuera tan fácil… Sí, me gustaría pensarlo pero no es tan fácil. Es evidente que es un buen sitio para hacer un buen resultado y cambiar la dinámica del equipo pero para eso se necesitan las herramientas que creo que aún no tenemos. Tal vez lleguen el lunes, que tenemos aquí el test, y empezamos a darle la vuelta a partir de entonces pero hasta el momento se antoja difícil.

—¿Es un circuito más o es un reto?

—Es un reto porque corres aquí, con tu gente y además pone a prueba la habilidad de los pilotos. Ya se vio con la Fórmula 1 hace unas semanas. Hay mucha temperatura, poco agarre y eso siempre genera un poco más de crisis: hay más caídas y la situación de carrera es un poco más crítica.

—¿Las caídas y los malos resultados le han llevado a dudar de usted mismo? ¿Le afecta?

—Siempre. Una caída es un pasito para atrás y luego para reconstruirte tienes que hacer un buen resultado para dar un pasito hacia adelante, pero si además le sumas que los resultados no están viniendo… es lógico que la confianza del piloto y el espíritu del equipo vaya decayendo un poco. En estas últimas carreras es lógico que, como no estamos teniendo los mejores resultados y además estamos cayendo, las cosas estén siendo complicadas.

—¿Y usted cómo gestiona esa frustración?

—Gracias que tenemos un equipo humano increíble en Repsol Honda, con gente de casa que me cuida, me quiere y me rodea de la mejor manera que puede y eso es indispensable, además de la gente que me rodea en casa, en mi vida privada. Aquí trabajamos como un equipo y cuando los resultados no salen es cuando realmente se ver el carácter del equipo y la unión que tienes con tus mecánicos. Y en este aspecto estoy muy contento.

—Cuando Suzuki anunció que abandonaba el Mundial se comentó que su puesto en Honda peligraba ¿A un piloto le afectan los rumores de mercado? ¿Le llega o se aísla?

—Evidentemente provoca un poquito de afectación. Miras más los resultados, hay más nerviosismo entre los pilotos, más competitividad, corres con un poquito más de ansiedad en algunos momentos, sobre todo si estás a punto de cerrar tu continuidad y depende de que ganes a otro piloto… Pero al final del día lo que tienes que mirar son los resultados que estás consiguiendo para la fábrica con la que estás trabajando ahora mismo, no importa el futuro. Yo, ahora lo que quiero es sacar resultados para Honda y esto tiene que empezar por el lunes. Vamos a sufrir el fin de semana pero a partir de lunes vamos a luchar para darle la vuelta.

—¿Pero no echa en falta que Honda dé un paso adelante y zanje los rumores, que le den un poco de mimo?

—Bueno… Puede servir de ayuda. Evidentemente de ayuda es. Pero sé que tengo la confianza del equipo. Nadie ha venido y me ha dicho lo contrario, nadie ha puesto en duda mi sitio ni mi puesto en Honda, sea en el equipo oficial o en el satélite. Eso ya me da seguridad pero es evidente que la situación no es agradable. Principalmente porque los resultados no están saliendo y a mí el mercado me importa poco si los resultados no están viniendo.

—¿Para usted es más importante ganar o disfrutar sobre la moto? ¿Si no se gana no se disfruta?

—Exacto, si no se gana no se disfruta. Cuando ganas puedes disfrutar más o menos pero si no ganas no. Todos los pilotos que estamos en MotoGP queremos y creemos que podemos ganar porque tenemos talento distinto pero o no se dan las circunstancias o no tienes las herramientas para conseguirlo… Aquí puede haber un segundo y un tercero que estén contentos cuando acaba el fin de semana pero quien está contento al cien por cien es el que gana. Los demás han perdido un poquito y cuanto más atrás en la clasificación, más han perdido. Así que contento del todo y feliz, solo hay uno.

—¿Cómo lleva la temporada que está haciendo su hermano Aleix con una Aprilia, moto muy inferior a la Honda?

—Me alegro mucho. Es un síntoma y una señal que en MotoGP importa mucho más el trabajo, el esfuerzo y la paciencia que el músculo que puedes tener. Vemos fábricas tan grandes como Suzuki, que se retira; Yamaha, que es inmensa; u Honda que es la más poderosa del campeonato, pero al fin y al cabo está sorprendiendo en el Mundial una Aprilia a ocho puntos del primero. Aprilia es una fábrica humilde, muy pequeña comparada con Honda o incluso KTM, haciendo buenos resultados. Eso te demuestra que no es un tema de presupuesto sino de presupuesto y otras cosas como esfuerzo y dedicación.

—¿Le gustaría compartir box con su hermano?

—No (risas). Siempre lo he dicho y va a seguir mientras que pueda permitirme ir a otro sitio que sea competitivo también.

—¿Y en pista, como vive una pelea con Aleix? ¿Sufre o no tiene en cuenta que sea su hermano?

—No me gusta. Y se sufre mucho más que peleando con otro piloto. Cuando tú adelantas a un piloto le afecta y va a perder tiempo, en curva alrededor de dos décimas y media. La limpieza del adelantamiento le puede llevar a perder estas 250 milésimas o medio segundo. Cuando estás adelantando a tu hermano intentas que sea lo menos lesivo para su carrera mientras que con otro piloto te da exactamente igual.

—Usted dijo que la paternidad no le cambiaría la forma de pilotar pero ¿realmente es así?

—¿Sabe que me ha pasado? Que a veces hay muchos momentos en los que me da pereza o estoy más cansado para entrenar y eso tiene su motivo. Antes era todo puro egoísmo, todo lo que hacía era por y para mí, todo el mundo vivía por y para ti, y cuando tienes familia y una hija esto cambia… Ya no lo hago para mí sino para que ella tenga una mejor vida mañana y otras oportunidades que yo no he tenido cuando era pequeño. Eso motiva muchísimo. Mucha gente lo ve desde la parte negativa pero yo lo veo como una parte muy positiva.

—Los hijos suelen seguir los pasos de los padres…

—No en este caso (risas). Parece que sea machista pero no es por eso, me da igual que sea niño o niña… No quiero que se dedique al motociclismo. Yo tengo dos niñas y no es un tema de que sean niñas. Si el día de mañana me piden una moto no voy a tener más remedio que enseñarles a ir en moto pero si hubiera tenido un niño la mentalidad no hubiera cambiado. No quiero que se dediquen a esto. Todo el mundo ve la parte bonita pero cuando has pasado por lesiones, operaciones, rehabilitaciones, las frustraciones de un deportista de élite… Todo eso es muy duro y poca gente lo ve ni lo puede entender. No quiero que mis hijas pasen por eso.

—Ahora entenderá lo que ha hecho sufrir usted a sus padres…

—Increíble, cien por cien. Me ha hecho ver que la vida de mis padres ha sido muy complicada porque lo han tenido que vivir por dos. Entiendo que ha sido un suplicio para ellos, por eso yo me quiero abstener (risas).

—¿Esta situación es remontable?

—Esperemos que sí. No es fácil cuando empiezas con estos problemas porque las fábricas que están yendo bien, no solo van bien sino que encima van mejorando y prueban cosas que este lunes les hará más rápidas. Nosotros tenemos que recuperar la distancia que no separa de ellas y encima acortar esa mejora que ellos van a hacer. No es nada fácil pero estamos convencidos que con trabajo y sacrificio le daremos la vuelta.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación