Mundial Rusia 2018

Familia España

Con la traumática salida de Lopetegui, el equipo se propuso aparcar cualquier opinión para después del Mundial, y Hierro implantó un mensaje común

Enrique Yunta

Esta funcionalidad es sólo para registrados

De la noche de Sochi, entendida en términos futbolísticos, llamaron poderosamente la atención dos detalles que tienen más relevancia de la que pueda parecer. Por un lado están, y no es tan absurdo mencionarlo, las caras de los jugadores españoles en cada uno de los tres goles , celebrados con una rabia que no se recordaba. Se ha vivido mucho estos últimos días, quizá demasiado, y era imprescindible expulsar ese miedo que atenazó al equipo durante los primeros minutos, tan angustiosos que era del todo lógico ponerse en lo peor. Y luego está, ya más a nivel interpretativo, las reacciones de los internacionales ante los micrófonos, casi calcados los discursos y aferrados a un tópico que cobra esta vez todo el sentido del mundo. «Somos una familia», comentaba Hierro en la sala de prensa, ya en mangas de camisa -ni una arruga pese al sofocante calor-, orgulloso por lo visto y tras recibir la felicitación del presidente de la FIFA, Gianni Infantino. «Somos una familia», recordaba Diego Costa , que cuando habla dice cosas bastante interesantes. Y así todo aquel que desfilaba por las entrañas del estadio olímpico Fisht.

No tiene nada de casual ese mensaje y menos después de sobrevivir a un terremoto de una magnitud hasta la fecha desconocida. España se partió en dos con el fichaje de Julen Lopetegui por el Real Madrid y su posterior destitución como seleccionador nacional y el equipo tenía unas ganas locas de fútbol, aunque había cierto pánico en la caseta. De ahí que se analizara bien el escenario, hablaran los pesos pesados y se dijeran lo que se tenían que decir unos a otros para centrarse únicamente en el Mundial, que no es poca cosa. «De nosotros depende», dijo el capitán, al que se le percibió un tono más plano de lo habitual en la víspera del estreno.

Ya en su atípica presentación, a Hierro se le llenó la boca de tanto usar la palabra «unidad», el primero en querer que se aparcara el tema Lopetegui porque no podía derivar en nada bueno. Ramos mantuvo esa línea en su comparecencia y emplazó al vestuario a realizar valoraciones personales después del torneo, copiando palabra por palabra su compañero Piqué . Lo dicho, nada es aleatorio, ni los mensajes en las redes sociales ni las reflexiones en voz alta.

Nada de ataques

Como es lógico, nadie esperaba un ataque o crítica interna a De Gea después de su fallo, pero sirvió ese error para que se recurriera al concepto de familia con el que se introducía este texto. «Nosotros somos un equipo, sabemos que los jugadores tienen mejores días y peores, es algo humano. Somos una familia, no dejamos tirado a nadie, ayudamos a seguir», introdujo Hierro, que fue el promotor de esa idea común. « Esto es una familia , aunque desde fuera se pueda pensar que no. Siempre estamos unidos, y lo demostramos en partidos como el de hoy», le respaldó Costa. ¿Y está más unida esa familia en la adversidad? «Estábamos unidos antes y también ahora. La vida cambia en segundos. Seguimos hacia adelante. Ha sido una pena lo que ha pasado, pero detrás de nosotros está nuestra familia, gente que quiere a esta selección y hay que luchar por ellos». Y así renace España, a la que por fin calienta el sol.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación