Sanluqueño - Castilla

De Güiza a Raúl: Sanlúcar vibra en una cita para el recuerdo

El Atlético Sanluqueño vence 3-1 al Real Madrid Castilla, entrenado por el mítico '7' blanco, en un Palmar que se vistió de gala para la ocasión

Dani Güiza-Raúl, duelo de Pichichis de la Liga en El Palmar

Raúl González, entrenador del Real Madrid Castilla, en El Palmar. FRANCIS JIMÉNEZ

Antonio Valimaña

Sanlúcar de Barrameda vivió una experiencia inolvidable. El Palmar vibró con una cita histórica. Y no era para menos, pues por muchos problemas que tenga, ver al Real Madrid Castilla por estos lares es un hecho singular. Al menos hasta que se ha creado la Primera RFEF.

Más histórica fue aún con la imponente victoria del Atlético Sanluqueño sobre el filial madridista (3-1). Un triunfo que deja a los locales cerca del 'play off' de ascenso a Segunda y a los merengues también cerca, pero en su caso del pozo que les llevaría a otra Segunda, la de la RFEF.

Raúl González firma un autógrafo en El Palmar. FRANCIS JIMÉNEZ

Edu Oriol encarriló la contienda con dos goles en el primer cuarto de hora de la cita. Al filo del intermedio se encargó el Real Madrid Castilla de recortar distancias en el marcador. Hasta que Armental apuntilló a los madridistas en la segunda parte. Ahí se decidió definitivamente la contienda.

Sin lugar a dudas, una hazaña sanluqueña que contó con todos los alicientes posibles en el terreno de juego y en la grada.

El Atlético Sanluqueño consiguió una victoria para el recuerdo y la celebró con sus seguidores. FRANCIS JIMÉNEZ

El pasado de la selección española

Y es que la de Sanlúcar de Barrameda fue una cita en la que el pasado de la selección española estuvo presente. Primero porque Dani Güiza tuvo diez minutos para disfrutar. Después porque Raúl González (una de las sensaciones de la mañana) sufrió en el banquillo ante el ímpetu verdiblanco.

Dani Güiza participó en los últimos minutos del encuentro. FRANCIS JIMÉNEZ

De un ganador de la Eurocopa con España a otro que se quedó sin serlo, aunque dejó huella en el Real Madrid. Y entre ambos un 'culpable': Don Luis Aragonés. El Sabio de Hortaleza.

Sanlúcar demostró que el bronce se lo ganó a pulso. En el césped, con sus jugadores, y en las gradas, con el empujo de su siempre fiel afición.

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