Estaba el Real Madrid mandando en Ipurúa, en juego y goles, cuando el Eibar trataba de sacudirse el dominio visitante. En estas, Kike García se inventó un monumental disparo desde fuera del área que logró superar a Thibaut Courtois con una preciosa parábola. Era el 1-2 y volvía a meter en el partido a un Eibar que daba señales de querer recuperar el pulso al partido. Lo hizo con un excepcional gol.
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión