Villarreal - Liverpool

«El arbitraje ha sido escandaloso»

Fernando Roig Nogueroles, consejero delegado del Villarreal, carga contra el colegiado Makkelie tras el posible penalti a Lo Celso

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La prensa alaba la gran Champions del Villarreal: «La primera parte fue un calvario para el Liverpool»

Iván Martín

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Poco menos de la mitad de la población un pequeño pueblo de 50.000 habitantes a los pies de Castellón llamado Villarreal vivió una noche agridulce en el estadio de La Cerámica en el partido más importante de la historia de su equipo desde que también cayeran en la semifinal de la Champions ante el Arsenal por allá en 2006. La afición amarilla vibró y rugió con los suyos para empequeñecer a un gigante, uno de los mejores Liverpool que se recuerdan, y eso son palabras mayores para un club que ha levantado seis Copas de Europa.

La gesta se intuía utópica, pero el fútbol, un arte tan bonito como impredecible, decidió que hubiera épica bajo la lluvia castellonense. El Villarreal murió en la orilla de la remontada ante un Liverpool, acostumbrado a torear en plazas complicadas, que sufrió como nunca lo había hecho en la temporada. Pero en la segunda parte, los de la ciudad de los Beatles despertaron para meterse de nuevo en una final de la Champions League.

Tras la desazón de la derrota, el primero en acontecer ante los micrófonos de Movistar fue Albiol , el hombre capital de la zaga de los de Emery. «Nos duele mucho por la gente. Al final no pudo ser, pero el esfuerzo del equipo ha sido increíble. El primero gol nos ha hecho daño y en la segunda parte han sido físicamente superiores. Hemos pagado el esfuerzo de la primera parte porque ellos son muy físicos» explicó el veterano central.

Con el mismo tono taciturno que Albiol habló un Gerard Moreno que jugó mermado por una lesión muscular, aunque, como acostumbra, dejó varias acciones técnicas de primer nivel. «Ha sido una primera parte increíble: no hemos perdido un duelo y la gente ha apoyado. Se ha puesto el partido como queríamos, pero ellos son muy buenos y físicamente se notó el bajón de la primera parte» comentó el ariete catalán. «Mentalmente el 2-1 nos hace mucho daño. Con un gol nos metíamos, pero nos dio un poco de bajón. Por el nivel de forma y por sus jugadores el Liverpool es el mejor equipo del mundo. Queríamos más, queríamos la final. La gente pensaba que no éramos capaces y llegamos eliminando a grandes rivales. La palabra que mejor define todo esto es el orgullo», concluyó.

Por su parte, Unai Emery , con un rostro de satisfacción, añadió: «Estoy contento y muy orgulloso, pero queríamos algo más. Hemos demostrado que que no estabamos de invitados en las semifinales de la Champions League».

Polémica arbitral

Cuando el descanso se empezaba a intuir, en el minuto 38, Alisson derribó en el mano a mano a Lo Celso. El estadio estalló en protestas reclamando la pena máxima, pero el árbitro, el neerlandés Makkelie no señaló penalti. Este suceso indignó al consejero delegado del Villarreal, Fernando Roig Nogueroles que calificó de «escandaloso» el posible penalti. «Me parece un penalti escandaloso a Lo Celso, no veo ninguna interpretación posible. El arbitraje ha sido sibilino, siempre se ha decantado a su favor. Este arbitraje no tiene nivel para un momento como este. Ha habido muchas pequeñas acciones que se decanta a su favor: hay tres faltas al borde del área en la primera parte, el balón parado es muy importante y no hemos podido tenerlo a favor. Las fuerzas fallaban y nos habría venido bien. No estoy caliente, es un orgullo llegar hasta aquí, pero el arbitraje ha sido muy malo» adujo el dirigente.

El protagonista de la acción, el argentino Giovani Lo Celso también lo vio claro: «Sentí el contacto en el empeine y a mí en la cancha me pareció penal, pero tendría que verlo en televisión. Sabemos cómo se dan las cosas y el penal hubiera cambiado algo el panorama, pero no es excusa. Ellos en la segunda parte hicieron su trabajo y encontraron los espacios para hacernos daño».

El Villarreal rozó la gesta en el primer tiempo y la remontada, por momentos, pareció algo más que una ilusión. Pero será el Liverpool quien esté en París el próximo 28 de mayo para disputar su tercera final de Liga de Campeones en los últimos cinco años.

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