Selección española

Luis Enrique y la peineta de Suecia: «Me sorprende que estéis pendientes del acto y no se denuncie la violencia verbal»

El técnico asegura que es más optimista que justo después del traspié de España ante Suecia y pide apoyo para levantar a la selección

AFP

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Después del tortazo de Suecia , ha cambiado el espíritu en Las Rozas, si bien Luis Enrique trata de poner buena cara e insiste en un mensaje reparador. Hay buenas palabras en el técnico asturiano, quien admite que tampoco España estuvo tan mal después de analizar el partido del jueves en Solna, cuyo resultado puede ser devastador. La derrota obliga a la selección a ganar los cuatro partidos que le quedan y esperar a que pinche Suecia para evitar una repesca durísima, por soñar que no quede. Lo cierto es que el Mundial de Catar está algo más lejos de lo deseado, pero de momento toca ganar este domingo a Georgia en Badajoz. El entrenador, que reclama el apoyo de la gente, habló también del episodio de la peineta en el Friends Arena (un aficionado se acordó de sus muertos, según los testigos) y hasta tuvo un vacile con la prensa.

«Claro que lo he visto», introdujo Luis Enrique cuando se le cuestionó por el duelo de Suecia, de donde salió echando humo. «Lo hemos analizado en profundidad, sí que soy más optimista. Hay muchas cosas positivas, cosas a corregir, como es lógico. No estuve acertado en lo de los duelos, no perdimos todos como yo pensaba. En lo futbolístico, las transiciones las podíamos haber mejorado. Hay errores en pases, de posicionamiento, hay acierto del rival… En general, más contento y con mejor idea individual y con la moral a tope para preparar lo que queda».

A partir de ahí, a partir de una primera reflexión de cercanía, se le fue buscando el titular al asturiano, que siguió en su análisis del partido. « El fútbol es un juego de errores . Hay de los dos, individuales y colectivos. El acierto de los suecos de cara al gol es destacable, es la suma de todo. Si repasáis resultados de las selecciones, la igualdad hace que sea muy difícil ganar los partidos. Hay que ver solo nuestro grupo. Mañana, contra Georgia, volveremos a tener dificultades y a sufrir. Jugamos en casa y eso nos beneficia, pero en la primera vuelta ganamos en el último minuto. Va a ser complicado, seguro».

A lo lejos, el Mundial de Catar, muy empinado el camino por esa derrota en Solna. «Es algo que no depende de nosotros. No depende de nosotros pasar como primeros, pero sí depende de nosotros estar en el siguiente Mundial. Si vamos a la repesca, depende de nosotros . Los profesionales tratamos de mirarlo desde el lado positivo. Si miramos la trayectoria de la selección en los últimos campeonatos, España e Italia son las únicas que han estado entre las cuatro mejores (Liga de las Naciones y Eurocopa). Si miramos los últimos resultados, de los últimos 10 solo habíamos perdido uno contra Ucrania. Yo, ya digo, miro el lado positivo, ver la botella medio llena».

Y desde ese optimismo, Luis Enrique trata de enganchar al personal. «Vamos a poner el foco en lo positivo . A la afición le diría que es un apoyo vital, jugar con el público a final influye mucho más. Me tranquiliza saber que soy la persona que más analiza a la selección. Tengo experiencia de sobra para aceptar ello. Vosotros trabajáis mejor con la gente si apoya y nosotros también, sobre todo si hay dificultades. No necesitamos tanto con 1-0, 2-0 o 3-0. Hay que apoyar cuando estás perdiendo o cuando estás necesitado».

A Luis Enrique le recordaron los datos, que dicen que solo ha ganado la mitad de los partidos, y rechazó esa estadística. «Es mejorable. Yo no soy muy amigo de estas cosas. Cuando me hacéis preguntas con componentes negativos , trato de contrarrestrar con datos positivos. Pero sí, todo es mejorable».

Y la rueda de prensa, en un sábado que parecía insulso, tuvo un par de respuestas diferentes. Primero, cuando se le preguntó por una supuesta peineta a un aficionado en Suecia. «Con la violencia verbal que sufrimos los deportistas, lo curioso es que estéis preocupados por mi respuesta y no por el acto. Era un insulto, no me interesa. Voy a pasar por alto, estoy acostumbrado a ellos. Pero lo curioso es que interese la respuesta de la persona que sufre la violencia y no el hecho en sí», replicó. Sobre ese acto, y del que no han trascendido imágenes, un espectador vestido con la camiseta sueca y con acento suramericano «le dijo de todo y se acordó de sus muertos», explican fuentes de la Federación

Luego, llegó el momento viral, pues Luis Enrique vaciló con su relación con los medios cuando se le preguntó si se siente permanentemente juzgado. «Yo no tengo representante. Tengo a mi asesor, que forma parte ya de mi familia. No se dedica a buscarme equipos. Pero, con los informes que me hacéis vosotros, siento ese cariño, siento que siempre tendré equipo. Estoy más que acostumbrado, también es cierto que no os doy lo que os gustaría que so diera, no soy gilipollas . Sé lo que espero de vosotros y vosotros lo que esperáis de mí. En los últimos 365 no he tenido ni una llamada de un periodista… Si no hay llamada significa que la relación funciona, mejor que siga así… Que siga todo así que a mí me gusta y a vosotros veo que también».

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