Grada de preferencia
La liga más cerca
La presión es un factor tan humano como imprevisible. El Madrid, seguir de cerca a Messi y diez más
Sonará raro, en estos días tan raros, pero visto lo visto en estas primeras jornadas de vértigo y silencio, el Madrid, a pesar de ir a rebufo del Barcelona, cosas de la programación Tebas, tiene la Liga más cerca. Suele recordarse una advertencia llegada de Italia hace ya mucho tiempo: «Las matemáticas no son opinión». Por matemáticas si se atiende a fortalezas de una plantilla los de Zidane, si éste sabe jugar su partida, van con ventaja. Uno a uno, y salvo las bajas por lesión, el Madrid dispone, al menos, de veintidós futbolistas aptos para ir al máximo en cada encuentro. Cuatro de los valencianistas que hoy llegan al Alfredo D’Stéfano ya jugaron con el Castilla en este mismo estadio: Parejo, Cheryseh, Rodrigo y Sobrino. Esa es la nómina.
El encuentro de esta noche de desescalada por fases tiene un doble aliciente. El Valencia no puede permitirse ya el más leve desliz. Celades tiene encima la sombra de un fracaso deportivo y económico: entrar en la Champions. La presión es un factor tan humano como imprevisible. El Madrid, seguir de cerca a Messi y diez más. Es de esperar que Zidane introduzca cambios respecto al domingo, pero se encuentra con un primer problema el lateral derecho. Si Carvajal no puede, le queda Mendy. Pero es conocido que un lateral a pie cambiado –experiencias patéticas ha tenido ya el Madrid- es un disparate. Pero no hay otra, lesionado Nacho, cedidos Achraf y Odriozola. Aquí la emoción, por mucho que se empeñen con los altavoces y las grabaciones, la ponen, o no, los que están en sobre el campo.
No fue gratificante, por mucha estrategia que se pretendiera, la segunda parte del Madrid frente al Eibar. Una cosa es dosificar y otra dormirse y dejar al bueno de Courtois que resuelva los despistes de sus medios y defensas. Casemiro, lo mismo que Mendy, está a una tarjeta de no ir a San Sebastián, otra baza de cuidado. En otra demarcación que tampoco tiene sustituto. La Liga está cerca, pero cualquier despiste, o sinsentido, o capricho puede ser definitivo. A la medianoche la respuesta.
