El Barcelona vuelve a hablar de Messi de forma pública

Hasta hace bien poco estaba prohibido hablar de Leo Messi en el Barcelona. Hacerlo le costó el puesto a Pere Gratacós hace unos meses y algún tirón de orejas a empleados del club. Incluso la plantilla censuró que ejecutivos valoraran la continuidad del astro argentino y el coste que podía suponer para las arcas de la entidad. Esta indicación parece haber prescrito después de las palabras de Jordi Mestre este pasado sábado durante la disputa del partido entre el Barcelona y el Villarreal. El vicepresidente deportivo compareció ante la prensa por la ausencia de Robert Fernández, el encargado de este menester, y le preguntaron por las informaciones que estaban apareciendo sobre las dificultades en las conversaciones entre los agentes del futbolista y el club.

«La renovación de Leo pinta muy bien. Todo acabará en buen puerto. Diría que ya está en la recta final y que en pocas semanas habrá novedades», explicó el directivo. Una afirmación que no desmintieron desde el entorno del jugador, aunque sí reconocieron que todavía quedan flecos por cerrar, «algunos más importantes que otros». Desde ABC ya explicamos cuáles eran las exigencias de Messi para aceptar continuar hasta el año 2022 y entre las económicas (exige una prima de renovación similar a la que percibió Neymar al fichar por el Barcelona) también destaca su preocupación por el proyecto deportivo, puesto que quiere seguir ganando títulos.

El Barcelona no zanjó el tema este mismo sábado sino que lo ha alargado para dejar claro que el acuerdo entre las partes está cercano y mandar un mensaje a todo aquel que quiera tratar esta circunstancia para crear una cierta desestabilización en el entorno en un momento en el que el equipo se juega la Liga. «Solo falta la firma», es el último mensaje que se ha filtrado desde las oficinas del club catalán, que está a la espera de solventar los flecos que quedan pendientes. Las conversaciones entre el padre del futbolista, Jorge Messi, y el presidente Josep Maria Bartomeu, que lleva personalmente las negociaciones, avanzaron considerablemente la pasada semana. Ahora, ambas partes esperan cerrarlo en breve, puesto que Jorge debe regresar a Argentina. Está pendiente de la resolución del Supremo sobre las alegaciones presentada a su condena por fraude fiscal y que está a punto de salir a la luz. En cuanto suceda volverá a Rosario.

En el Barcelona quieren transmitir una sensación de tranquilidad y han filtrado que no consideran vital que el acuerdo se cierre inmediatamente porque las bases y la parte más compleja del contrato ya están sentadas, por lo que el anuncio oficial podría darse a conocer al término de la temporada, cuando el Barcelona ya no se juegue nada. Incluso no descartan que se posponga a principios de la próxima temporada si el futbolista se marcha de vacaciones nada mas acabar la final de la Copa del Rey. Insisten en que están tan tarnquilos que delegan en el propio Messi el momento en que lo quiera hacer público.

No es casualidad que los dos diarios deportivos de Barcelona abran sus informaciones con este tema y la portada esté dedicada a la renovación de Messi dando por hecho que el argentino ya está atado. Los gestos del jugador en los últimos partidos no han pasado desapercibidos. Desde el club se han destacado dos imágenes que han dado la vuelta al mundo La primera es Messi encaramado a la valla y rodeado de público tras el sexto gol que cerraba la goleada y confirmaba la remontada ante el PSG en Champions, y la segunda su gesto de quitarse la camiseta y mostrarla en el Bernabéu tras anotar el gol del triunfo. A falta de tres semanas para que acabe la temporada, la negociación ya ha entrado en su recta final. Los goles de Messi y su rendimiento le permiten merecer todas las peticiones solicitadas. Hay que recordar que esta temporada ya ha marcado 51 goles, algo que ha conseguido en otras cuatro campañas, y que en Liga suma 35 tantos, lo que le llevará a ganar el Pichichi y la Bota de Oro.