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Oficial: Suspendido el Rayo Vallecano-Albacete por los insultos a Zozulya
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Primera suspensión de un partido de Liga por insultos a un futbolista: algunos casos similares ocurridos en el pasado
La vuelta de Roman Zozulya al estadio de Vallecas acabó anoche en escándalo porque la segunda parte del Rayo-Albacete, correspondiente a la jornada 21 de la Liga de Segunda división, no se disputó al decretar el árbitro la suspensión del partido en el descanso debido a los gritos y amenazas dirigidos desde la grada contra el delantero ucraniano del conjunto manchego en el tramo final del primer acto, según explicó LaLiga en un comunicado. Es la primera suspensión por insultos en el fútbol español.
[Lea el comunicado de la Liga sobre la suspensión]
Zozulya regresaba por primera vez a Vallecas después de que, en enero de 2017, el Betis cediera al delantero al conjunto franjirrojo, con el que no llegó a debutar por el rechazo de parte de afición rayista al ucraniano debido a su presunta ideología nazi . Una acusación que el jugador siempre ha negado. Ayer, el futbolista volvía al que fuera su estadio durante apenas unos días, saltando al terreno de juego en el once titular del conjunto entrenado por Ramis. En los minutos finales de la primera parte, el sector de la afición rayista que se sitúa en el único fondo del estadio, el que ocupan los «Bukaneros», grupo radical de izquierdas del conjunto madrileño, la tomó con el atacante, al que gritó «¡Roman Zozulya, puto nazi!». El árbitro del duelo, el cántabro José Antonio López Toca, solicitó al delegado de campo del conjunto local que se pidiera por megafonía el cese de los gritos, pero continuaron escuchándose hasta el descanso, al que se llegó con empate a cero a pesar de que el «Alba» se había quedado en inferioridad en la primera parte por expulsión de Silvestre.
Ni los jugadores ni el trío arbitral saltaron al terreno de juego tras el descanso ante la sorpresa de la afición presente en Vallecas. Con mofa, y mientras seguían esperando en la grada la vuelta de los equipos, seguidores franjirrojos cantaron «¡Era una broma, Zozulya era una broma!». No era cosa de risas y López Toca y la Federación, según explicó el conjunto manchego en sus medios oficiales, decidieron suspender definitivamente el partido «con el respaldo de Rayo Vallecano, Albacete Balompié y de LaLiga ». El delantero ucraniano, según confirmaron desde su club, se encontraba muy afectado por los gritos que escuchó en el tramo final de esos 45 minutos iniciales e incluso rompió a llorar en la caseta. Una sensación de indignación que también sintieron sus compañeros. «Es una noche muy triste para el Rayo y el deporte. Queremos condenar tajantemente los insultos que una parte de la afición, ubicada en el fondo, ha proferido a un jugador rival», reconoció Raúl Martín Presa, presidente del Rayo.
La versión del Albacete coincidió con la aportada por la LaLiga, que manifestó «su acuerdo con la decisión tomada por José Antonio López Toca de suspender el encuentro ante los graves insultos y amenazas sucedidos durante la primera parte contra Zozulya y ante la petición de los dos equipos en el estadio de Vallecas». El conjunto madrileño, sin embargo, intentó hasta el último momento que la segunda parte se jugara sin público, un objetivo que finalmente no consiguió. «Debido a los reiterados cánticos e insultos proferidos durante la primera mitad del Rayo-Albacete, el partido queda suspendido», informó el club vallecano.
[Algunos casos similares ocurridos en el pasado]
«Ni por racismo, ni por xenofobia, ni por violencia. La primera vez que se suspende un partido en España es por decir la verdad. Zozulya eres un nazi», insistieron los «Bukaneros» en sus redes sociales horas después de la suspensión del partido. El primero que no se puede disputar en España por los gritos e insultos contra un futbolista, aunque en países como Italia ya se han vivido situaciones similares durante esta temporada, en la que han sido interrumpidos hasta tres partidos.
En 2017 no viajó a Vallecas
Zozulya fue noticia en el mercado invernal de la temporada 2016-17, tras la negativa de gran parte de la afición del Rayo a que firmara por el cuadro franjirrojo, al acusarle de presunta ideología nazi y de estar relacionado con grupos paramilitares de su país. Al final, esa presión evitó el fichaje y el ariete ucraniano se quedó sin equipo en ese mercado invernal porque ya había estado en dos equipos y la normativa le impedía fichar por un tercero. Tras ello, Zozulya hizo ese verano la pretemporada con el Betis, y, tras rescindir su contrato en septiembre, firmó por el Albacete.
En noviembre de 2017, su equipo visitó Vallecas, pero el delantero no se desplazó con el Albacete en previsión de que se pudieran producir incidentes. Esta semana, se había especulado con la posibilidad de que el atacante tampoco viajara a Madrid, opción que finalmente se descartó.
«Solo pido respeto para Zozulya. Cada uno puede opinar, pero con respeto. Si Vallecas tiene que opinar, que lo haga con respeto. Solo me importa que Zozulya es un buen delantero, el resto no me interesa», reclamó Paco Jémez en conferencia de prensa en la víspera del partido. «¿Sanción para el Rayo? El Rayo es una víctima. Hemos puesto todos los medios a nuestro alcance. El entrenador hizo un llamamiento de respeto. Hemos sido una víctima», afirmó ayer Martín Presa.
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