Pau Gasol Cádiz
«Pau era en Cádiz lo que se ve; un tío sencillo y normal»
El puertorrealeño Álvaro Quirós trabajó en prensa de la Federación en los años dorados de la 'Ñ' y recuerda vivencias gaditanas del mejor jugador español de la historia
Recién salido de la Universidad y tras unas prácticas en LA VOZ, el puertorrealeño Álvaro Quirós desembarcó en el verano de 2007 en el departamento de comunicación de la Federación Española de Baloncesto. Se lo podía imaginar, pero a los años comprobó que compartió momentos con la mejor selección española de todos los tiempos . Y en su tierra, Cádiz.
Como no, sus vivencias con Pau Gasol «y con todos los demás» -recalca Quirós siempre- fueron irrepetibles y destaca por encima de todo «la sencillez y la normalidad que se respiraba en un equipo plagado de estrellas» donde la del pívot barcelonés era la que más brillaba.
«El trato con Pau era genial. Era y es un tío que normal y sencillo, lo que se ve y se ha visto en su rueda de prensa de despedida. Así ha sido su comportamiento durante toda su carrera, ningún mal gesto, ninguna mala cara. Más que los títulos que ha ganado, siempre llevaba a gala su forma de ser», asegura Álvaro, que en su primer año en San Fernando como ayudante de Roberto Hernández, el entonces jefe de prensa de la selección, nunca tuvo un problema sino todo lo contrario a la hora de pedirle a los internacionales algún tipo de compromiso con los medios de comunicación.
Quirós destaca de Pau Gasol que, además, «cada vez que venía con la selección se le notaba más distendido, más cómodo que en su día a día en la mejor liga de baloncesto». En este sentido, aconseja la visión del documental de Amazon 'La Familia' para hacerse una idea de lo que era la rutina dentro de esa selección. «Él era uno más, siempre lo ha sido a pesar de levantar pasiones», reconoce Quirós.
Ya en 2006, antes de ganar el Mundial ante Argentina, Quirós recuerda como periodista que «Pau era ya una estrella de la NBA y era el jugador al que todo el mundo en San Fernando quería ver. Se notaba cuando estaba y cuando no por todo lo que levantaba a su paso. Y pese a ese revuelo de antes y después, él siempre se paraba a firmar autógrafos, a atender a quien se lo pidiera. Y eso, dentro de las prisas que se viven en ese tipo de concentraciones era un gesto de incalculable valía».
Ya desde dentro, Álvaro veía como todo eran facilidades dentro de un grupo de elegidos. «Recuerdo que un verano en San Fernando, en 2009, se lesionó la mano y tuvimos que llevarlo a un hospital de Sevilla . Pues incluso así no tuvo objeciones de atender a la prensa y a los compromisos que le dijimos que habia que atender. Era genial ese trato que tenía con todos».
Aquellos años en Cádiz, de 2006 a 2010, «fueron la bomba». Y sí, la selección y los internacionales «se encontraban como en casa». Una buena prueba de ello eran esas noches que, de no ser por la altura de todos ellos, hubieran pasado desapercibidos en el Barabass, el bar de copas de moda de aquellos años en Cádiz.
Sobre esto, Quirós da su opinión referente a lo que significaba esta tierra para la selección. «Hay que darse cuenta de que venían un mes y como todo profesional y toda persona necesitaban de sus tiempos de ocio, de paseos y de tiempo libre para desconectar. Además, para todos ellos San Fernando es como un talismán porque ha sido aquí donde se ha gestado un poco todos esos años dorados que van de 2006 a 2010 en el que ya la selección preparó el MundoBasket en Gran Canaria. Desde los doce que fueron a Japón a los doce que estuvieron en 2010, estoy seguro que todos hablan de San Fernando de maravilla. No se podía decir que estuvieran de vacaciones porque luego los resultados están ahí, pero había días que sin duda lo parecía», recuerda Quirós, quien también vivió una preparación en Gran Canaria.
Volviendo a esos tiempos en San Fernando, la selección hacía por verse y empaparse de lo que era Cádiz. Y por lo que cuenta Quirós, conocían muy bien el terreno. «Siempre que había que hacer una comida de bienvenida a un nuevo internacional nos íbamos a cenar a El Chato» , recuerda. E incluso el cuerpo técnico aprovechaba el descanso de los jugadores para llevarse al staff de comunicación y distintos ayudantes de la selección a restaurantes conocidos de San Fernando como la Venta Vargas. Entre los directivos, destaca Quirós a Miguel Gallardo, dircom de la Federación y un apasionado de esta tierra, especialmente de Chipiona, donde veranea.
«Independientemente de donde estuviesesn Pau y todos, que ya por entonces muchos eran también NBA, tenían un trato exquisito con prensa y afición. Pese a ser jugadores TOP, no cambiaron un ápice su forma de ser», atestigua.
Quirós pone un ejemplo muy presente con el actual presidente de la Federación Jorge Garbajosa. «Este verano se ha jugado un sub'16 de la FIBA y han estado por aquí y yo fui a un partido. Pues bien, han pasado diez años de aquellas concentraciones en San Fernando y Garbajosa vino a saludarme con muchísima ilusión y con inolvidables recuerdos. Así es Pau y así eran todos de esa generación».
