La muerte de Kobe Bryant fue un golpe para medio mundo, pero especialmente en EE.UU., donde la estrella de Los Angeles Lakers se convirtió en todo un mito.
Los homenajes a Bryant fueron una constante a lo largo del día de ayer en cada rincón del país americano. Con una noticia de tal calibre se esperaba que los partidos previstos de la NBA se suspendiesen.
No obstante, el encuentro entre los Toronto Raptors y los San Antonio Spurs se acabó celebrando. Mucha gente no entendió tal decisión , entre los que se incluyen a algunos jugadores. Fue el caso de Marc Gasol, que mostró su desacuerdo tras el choque.
«No era el momento de jugar al baloncesto. Noticias como la muerte de Kobe Bryant son un shock muy duro. Cosas así demuestran lo frágil que es la vida. Nadie quería creer lo que estaba pasando. Es un día muy duro para la NBA », conluyó el pívot.
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