Irving, en cuarentena después de que su equipo le levantase el veto por antivacunas

Kyrie Irving le ha ganado la batalla a su equipo y a la NBA y debutará próximamente en la temporada con los Brooklyn Nets pese a no estar vacunado, una decisión que le había alejado de las canchas hasta ahora. Lo hará, eso sí, una vez pase cuarentena y dé negativo en varios test (más que el resto de jugadores al no haber recibido ninguna dosis), pues el jugador, paradójicamente, entró esta tarde en los protocolos de salud de la liga al haber estado en contacto con el virus.

La estrella estadounidense avisó desde la pretemporada que no tenía pensado recibir la vacuna, a la que definía como un «instrumento de Satanás para controlar a la población negra». El estado de Nueva York, hogar del equipo, tiene unas leyes muy restrictivas en lo que a la no vacunación se refiere: nadie puede entrar en ningún pabellón sin estar inmunizado . Los Nets, ante la tesitura, decidieron descartar a Irving hasta nuevo aviso, pues solo podrían contar con él en los partidos fuera de casa. El jugador perdía cerca de 300.000 euros por partido no disputado, pero no renunciaba a sus creencias y los Nets conseguían mantenerse en lo alto de la clasificación. Todos contentos, hasta ahora.

El equipo, como tantos otros ( 49 positivos en la NBA hasta el pasado viernes y solo en diciembre), sufrieron un brote de Covid la semana pasada y hasta siete de sus jugadores tuvieron que hacer cuarentena. Sin mucho margen de reacción, la directiva decidió concederle el honor a Irving de ser el primer antivacunas en la élite del deporte que se sale con la suya. Parece que, pese a que el jugador está en cuarentena, el plan no se cancelará y Irving acabará debutando en las próximas semanas, una vez pase todos los cortafuegos de sanidad de la liga y se demuestre si se ha infectado o no con el virus.