Champions
El Atlético tiene en tres noches el sueño de 117 años
En el formato exprés de la Champions, dispone de la oportunidad de levantar el trofeo que históricamente lo ha maltratado
hay Champions en Lisboa porque así lo decreta la UEFA en un programa oficial. Se congregan en Portugal los ocho mejores equipos del curso, fútbol de primer nivel, pero la realidad no se puede esconder. Aquí impone su ley la Covid-19. Un paraje insólito en el que no hay bullicio ni el jolgorio propio que arrastra el fútbol. No hay signos visuales de que en Lisboa se celebra el mayor desafío anual del deporte rey en Europa. No hay hinchas, claro, salvo tres entusiastas del Atalanta que parecen extraterrestres, tampoco una atmósfera que envuelva la ciudad con algún tipo de manifestación en calles, vallas o incluso el estadio José Alvalade, que hoy acoge el estreno del Atlético en su reto milenario. Ha arrancado la Champions a ocho y el club madrileño se cita con el torneo que lo ha maltratado históricamente. De Schwarzenbeck en Bruselas a Sergio Ramos en Lisboa y al penalti de Juanfran en Milán, la Champions siempre fue esquiva con el Atlético. Tiene tres noches para soñar con un torneo que nunca ha ganado. Hoy, el Leipzig, y, si vence, más adelante ya se verá. Es la fiesta o la puerta de salida . Ganar o adiós. Tres días para restañar un hueco de 117 años.
El aroma a vida se percibe en las carreteras de Portugal, los pueblos que se expanden por las suaves colinas de la Sierra de Estrela, Belmonte, Caria, Fundao, Castelo Novo, sus posadas donde se impulsa el turismo interior y se puede degustar un bacalao a bras o los quesos da Serra, donde se viaja por sus cómodas autopistas con telepeaje cada quince kilómetros ... Pero en la urbe, en Lisboa, manda el coronavirus, que casi entierra la Champions con su manto venenoso.
En esta tesitura, con dos positivos que se quedaron en casa (Correa y Vrsaljko) y una lluvia de casos en el fútbol español, el Atlético se vuelve a ilusionar con la Copa de Europa. Lo hace en la ciudad que generó una conmoción en el club y su hinchada – aquel cabezazo de Ramos en el minuto 93– , aunque en otro escenario –juega en el José Alvalade, no en La Luz–. Del recuerdo de aquella pesadilla que tantas lágrimas provocó, solo quedan el incombustible Koke, ahora capitán, el hijo pródigo Diego Costa, que no ha vuelto a ser el que fue, y, por encima de todos, indiscutible como pilar del club, Diego Simeone.
Aunque por encima de todo, permanece un estado de ánimo, auténtico rasgo de carácter y espíritu de la institución: la perseverancia. Golpeado, herido y casi hundido en los penaltis de la tercera final perdida (Milán 2016), el equipo colchonero está de nuevo en pie y renovado en todas las líneas para intentar el sueño inalcanzable. Insistir y resistir, dos conceptos clave en el guión de usos y costumbres del cholismo.
También de manual es el «partido a partido» que el técnico encumbró como seña de identidad. Ayer, ante los medios europeos, el Cholo desdeñó cualquier conjetura o análisis que no se refiriese al choque de hoy con los alemanes. No quiso valorar si el fútbol le debe una Champions al Atlético o no. O si esta puede ser una última oportunidad. «Lo único importante es ganar, no me centro en otra cosa que no sea el partido que tenemos delante».
El estrés del virus
Solo se salió del camino Simeone para recordar a los ausentes Correa y Vrsaljko. «Nos duele no tener a Sime, que jugó cuando estaba recuperándose de una lesión y no estaba en condiciones. Y lo mismo de Correa, que es todo corazón. Esperemos que los tengamos más adelante , si avanzamos en la competencia».
El coronavirus ha alterado la dinámica opgtimista que aupó al Atlético hacia un gran final de temporada en la Liga después del confinamiento. No solo por haber trastocado los planes de viaje y entrenamientos programados por el técnico, sino también por el nivel de angustia que ha afectado a los jugadores.
Lo explicó Oblak en su estilo concreto y directo. «El pasado sábado salimos del entrenamiento muy tranquilos, pero después de los positivos de Ángel y Sime la situación se volvió estresante . Tuvimos que esperar y hacer un nuevo test, que ahora es algo muy común en el mundo, pero claro el domingo estábamos estresados mientras esperábamos. Nos pusimos nerviosos, porque puedes ser asintomático y ni lo sabes».
La misma tensión tendrá que tramitar hoy. La UEFA sometió al Atlético y al Leipzig a análisis PCR y los resultados se conocerán antes del partido. Aunque en el conjunto colchonero ya sintieron alivio el lunes cuando los test descartaron más contagios entre la plantilla, la incertidumbre que provoca el coronavirus y sus efectos imprevisibles se dejará sentir enla expedición, como reconocía Oblak.
Mientras las pruebas no digan lo contrario, Simeone tiene el plan diseñado contra el Leipzig. El mexicano Herrera se ha hecho hueco y previsiblemente hoy será uno de los ejes del equipo en el centro del campo. Con la duda de Trippier o Arias en el lateral derecho, Marcos Llorente y Diego Costa se perfilan en la delantera, por lo que Joao Félix, la perla portuguesa, empezaría en el banquillo.
