coac 2024
Los que salieron perdiendo: la carga más gaditana a costa de la Casa Real
La chirigota de Carlitos Pérez pisa a fondo en cuartos y presenta argumentos para algo más que semifinales
Séptima sesión de cuartos de final del COAC 2024
Chirigota
Los que salieron perdiendo
- Autor Carlos Pérez Pérez
En el pase de preliminares, la chirigota de Carlos Pérez Pérez asombró colándose en Cádiz dentro de una caballa. Una ligera variación: estos carnavaleros no están en la guerra de Troya; su misión es mucho más importante: defender la ciudad de agentes externos que están acabando con su esencia. El caso es que por mucho que aún no hayan logrado su objetivo, en estos cuartos se han asentado y caminan por sus calles como Pedro por su casa.
Como de Cádiz saben un poco, no se les escapa el atropello del obispado y la codicia de su imperio, la iglesia. Para estos va la primera letra de pasodoble, cuyo trío es de lo uno no se cansa de escuchar. Y el grupo lo defiende como si les fuera (o porque les va) la vida en ello.
El recurso del símil resulta una muy buena idea para la segunda letra de la tanda. «La caballa que presento es igualita que España», anuncian al inicio y, tras numerosas y logradas analogías entre la nación que les alberga y la caballa en la que se esconden, concluyen que, como las del pescado, las entrañas de su país están podridas. Letra muy ovacionada, aunque no iba a ser lo mejor del pase.
Los cuplés, brevísimos pero certeros, han puesto el foco íntegro sobre la Casa Real. En el primero explican que Leonor, por su condición de princesa, nunca tendrá libertad la pobre: «Nunca podrá fumarse un porrito», por ejemplo... Froilán, por su parte, todo lo contrario. «Lo que quiere es coger a la prima y darla un porrazo», concluyen.
Las cargas del estribillo, que cambia de chiste después de cada pieza, esta vez ha tenido como destinarios al secretario del jurado y a El Waxi, integrante de la comparsa de El Chapa y Raúl Cabrera. En el popurrí insisten en su objetivo: vienen a recuperar las cosas del gaditano. Repleto de golpes con sabor añejo, han despedido el pase con una sensación entre el público de que van a pasar cosas importantes. Resultan que tal vez no hayan salido perdiendo tanto.
