Coac 2024
Los exageraos: los cuplés (y las coletillas) que valen una final
La chirigota de Juan Miguel Villegas da el paso definitivo hacia la final del viernes con otra enorme tanda de cuplés
Chirigota
Te he dicho 1.748.645 veces que no soy exagerao (los exageraos)
- Autor Juan Miguel Villegas
A la fina
Vera Luque trajo en 2020 la moda de las cupletinas. Si la chirigota de Juan Miguel Villegas repitiera diez cuplés en la final —contamos con que pasa, ¿no?—, sería la agrupación que más habría exprimido la fórmula hasta el momento. Los cuplés de esta chirigota, además de que funcionan casi todos, tienen la particularidad de que cuentan con una coletilla hacia el final que cumple bien la función de redondear el chiste, bien salvar el propio cuplé.
Al precavido con el Covid que luego se fuma la grifa que viene en la parte del cuerpo que viene, a la vasectomía, a las teles nuevas y su nitidez, al restaurante de «comida chica en platos grandes» y el último de la primera tanda, a Negredo. Letra de última hora, a tenor del reciente despido del futbolista.
La segunda tanda crece con el precio de los alimentos (el primero). Y la recurrencia del coño sustituye en esta fase a la del queso: a propósito, las preguntas molestas de los niños, Felipe VI, amor de sus amores y una vidente para saber quiénes pasan a la final.
Buen primer pasodoble, reclamando locales de ensayo. Las agrupaciones se vuelven invisibles cuando acaba el concurso, denuncian ante la apatía de las administraciones.
En el segundo se muestran escépticos con la reinserción de los violadores. No parecía una letra muy adecuada para semifinales. El popurrí es muy divertido, aunque son los cuplés los que pueden auparles a todo este año, con permiso de El Sheriff, entre otros.
