Malos tiempos para el comercio

La situación que atraviesa el comercio en la ciudad es preocupante, sobre todo si se pretende que sea uno de los pulmones económicos que sostenga a la localidad, convirtiéndose en un atractivo dentro de la oferta turística en la que San Fernando busca abrirse paso. Los grandes núcleos de esta actividad en el municipio están pasando serias dificultades y ante el panorama actual, azotado por la crisis, buscan una reconversión que les permita sobrevivir. Bahía Sur, el centro comercial San Fernando Plaza y los negocios a pie de calle; ni uno se libra y todos están inmersos en un proceso de cambio que asegure su viabilidad.

La Asociación de Comerciantes de la ciudad (Acosafe) continúa con sus encuestas en diferentes zonas de la localidad, con el objetivo de hacer un mapa en el que se recojan las peculiaridades de cada espacio y sus problemas. De esta manera, se llevarán a cabo diferentes iniciativas para intentar reactivar el comercio. Una de las obsesiones es la de conseguir atraer más personas al centro. Por ello se siguen apoyando actividades como el Mercado Medieval que por quinto año consecutivo se instala en plena calle Real. Un reclamo con el que se pretende despertar interés para que las personas acudan al centro y repercutir en los negocios de la zona. Aunque también intentará seguir avanzando en la marca de Centro Comercial Abierto, algo que será más complicado ante la falta de subvenciones y ayudas de las instituciones que han cerrado el grifo por culpa de la crisis.

La obsesión de Bahía Sur se centra en remodelar su zona de restauración. Lo que pretende es reconvertir su filosofía para convertirse en un referente gastronómico. En este caso, Bahía Sur ya ha obtenido todos los vistos buenos que precisa para convertir la idea en realidad. Aunque no se puede hablar de ampliación, sino más bien de reconfiguración del espacio, ya que la zona de restauración seguirá contando con los mismos metros cuadrados, pero con unos cambios muy significativos para poder abrir más terrazas y aprovechar su paseo marítimo.

Incluso, aunque todavía se encuentra en una fase temprana, ya existe un planteamiento inicial de obras con la intención de que los trabajos puedan comenzar en septiembre y que estén listos para la Semana Santa de 2014. Algo a lo que se ve obligado ante la competencia que ha surgido en los últimos años y para seguir siendo un espacio referente en la provincia con suficiente fuerza para atraer operadores y seguir creciendo. Eso sí, la ampliación como tal queda aparcada a la espera de mejores tiempos ante su coste.

Y por último, el centro comercial El Plaza, otro espacio que se encuentra con dificultades y que por ello ha decidido entrar en concurso de acreedores. Un procedimiento que no pone en duda el futuro del complejo, que se encuentra ubicado en el centro de San Fernando, ya que el juez concursal considera que el proyecto es viable. De hecho, desde la empresa que lo gestiona se considera que en un año se pueda solventar el problema y ponerse al día en los pagos. Eso sí, lo que se ha pretendido es dar mayor tranquilidad a los acreedores siendo intervenidas sus cuentas por unos administradores concursales que se deben designar y cada decisión que se tome tendrá que tener su visto bueno. Pero se apuesta por el edificio por una razón muy sencilla, porque de sus 51 locales hay 40 cuyos operadores están al día de los pagos, y a los que no se les quiere perjudicar el negocio.