Un operario trabaja en los contenedores de la plaza de Las Bodegas. :: C. R.
Chiclana

Aragón mantiene que los contenedores estarán soterrados en 2013

Hasta ahora el Ayuntamiento no ha recibido la autorización de la Consejería de Cultura para comenzar las obras en el casco histórico

CHICLANA. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El soterramiento de contenedores en el centro de la ciudad es uno de los proyectos que el Consistorio arrastra en este ejercicio. A mitad de octubre comenzaron las labores en la plaza de Las Bodegas para sustituir los antiguos contenedores por unos nuevos, con el sistema automatizado Easy, que serán los que se implanten en el resto del casco histórico.

La intención municipal en julio era que en septiembre comenzasen los trabajos para concluir antes del comienzo de 2013. Una posibilidad que hasta ahora sigue defendiendo el delegado municipal de Medio Ambiente, Nicolás Aragón, quien expresó que «se podrá hacer antes de que empiece el nuevo año».

Sin embargo, las obras avanzan más lentas de lo previsto, no solo en cuanto a su fecha de inicio, si no porque aún el Ayuntamiento no dispone del visto bueno de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía. Dicha autorización es indispensable antes de acometer los trabajos en calles del casco histórico.

Según explicó Aragón, para las labores que se están desarrollando en la Plaza de Las Bodegas y que tocarán fin en próximos días «no ha sido necesario el visto bueno de la Junta porque consiste en cambiar unos por otros nuevos».

Además de éstos, el resto serán un total de once, cuya ubicación está aún por determinar por una comisión formada por técnicos municipales, empresas suministradoras (Sevillana-Endesa y compañías de telefonía), adjudicataria del servicio (Urbaser) y Chiclana Natural.

Eliminar el 'bolseo'

Una de las razones del proyecto del soterramiento de equipos de recogida de residuos sólidos urbanos es suprimir el 'bolseo' en las calles del casco histórico, donde todavía los residentes dejan la basura en la puerta de sus domicilios.

Asimismo, con este proyecto se busca mejorar la estética de la ciudad y quintuplicar la capacidad de recogida de residuos en relación con los tradicionales. Con ello, los vecinos se beneficiarán de la reducción de olores y del ruido.