El desarrollo inmediato del Carenero dependerá de la inversión privada

Es una de las actuaciones emblemáticas del Bicentenario, pero a día de hoy sigue sin estar finalizada. Al menos ya le queda poco, se espera que para septiembre esté ya concluida la primera fase de recuperación del entorno del puente Zuazo, aquella que comprende la rehabilitación de las baterías defensivas y del Real Carenero. En este último emplazamiento es donde se están dando ya los últimos retoques (el grabado en negro de los espacios entre los sillares). Lo que no quiere decir que su apertura al público sea inminente. En primer lugar porque queda la segunda fase, es decir la reconstrucción del puente Zuazo (con un coste de 18 millones de euros), mientras que, por otro lado, aún se tiene que acordar su plan de usos. En definitiva, saber qué contendrá cada espacio.

Una apartado en el que ya se trabaja tanto por parte del Ayuntamiento de Puerto Real como por el de San Fernando. Aunque aún no existe un proyecto cerrado y no hay nada más que propuestas en cuanto a su futuro, ambas administraciones ya están de acuerdo en distintas líneas. La primera y más importante es que el desarrollo del espacio debe ser consensuado y trabajado tanto por uno como por otro municipio, implicando si es posible a las mancomunidades. A ello hay que añadir el convencimiento de que cualquier iniciativa que se realice debe contar con un respaldo de empresas privadas. Es más la propia regidora de Puerto Real, Maribel Peinado, realizó un llamamiento a los emprendedores que quieran y tengan ideas para este lugar. Porque saben que el sitio histórico precisa tanto de espacios culturales como de ocio.

Son simples trazados, pero es el boceto de lo que significará el Real Carenero para el futuro tanto de San Fernando como de Puerto Real. Un lugar que contará posiblemente con un museo, mientras que otras zonas se dejarán para la hostelería y la realización de diferentes talleres y actividades de carácter cultural. Pero todo ello movido por la iniciativa privada y con el respaldo de las administraciones. Al menos esa es la fórmula que pretenden utilizar tanto San Fernando como Puerto Real.

Por fases

Y todo ello cuando queda pendiente la gran transformación de este emplazamiento histórico, la rehabilitación del puente Zuazo. Algo que por el momento parece una utopía, pues Fomento no puede hacer frente a su elevado coste. Lo que no quiere decir que las administraciones de La Isla y de Puerto Real hayan tirado la toalla.

Actualmente están estudiando las diferentes formas para poder llevar a cabo la actuación. Por el momento lo más factible es la de fasear la obra, de modo que se busque inversión para cada tramo del proyecto. También hay que recordar que la cifra de 18 millones de euros no solo proviene de la necesidad de tratar uno por uno los sillares del puente, sino que se quiere aprovechar la actuación para mejorar la red de agua que transcurre por el Carenero (con varias fugas), así como la comunicación del tráfico en la zona. Mucho trabajo por delante mientras el Bicentenario se escapa.