El gobierno local no descarta rescatar o municipalizar el transporte urbano

La huelga de autobuses urbanos sigue sumando días sin que aparezcan signos de esperanza en el horizonte. La alcaldesa de la ciudad, María José García-Pelayo, se refirió ayer al conflicto que mantiene en jaque el transporte público en la ciudad. Concretamente, apuntó que el Ayuntamiento «no descarta» rescatar o municipalizar el servicio aunque los costes serían muy elevados en ambos casos.

La intención municipal es «solucionar el problema definitivamente» de ahí que no hayan suprimido de sus alternativas ninguna de las mencionadas. No obstante, la primera edil se mostró cauta con cualquiera de las dos opciones debido a los altos costes económicos. Así, en el caso del rescate, el Ayuntamiento tendría que devolver el aval que depositó la empresa al hacerse cargo de la concesión -seis millones de euros- e indemnizar además a la compañía por los 15 años de contrato que le quedaban. «Rescatar tiene unas consecuencias desorbitadas para éste y para cualquier ayuntamiento», dijo la alcaldesa.

La alternativa de la municipalización es aún más complicada si cabe y, a la larga, más costosa. El equipo de gobierno ha analizado el caso de otras ciudades que lo tienen municipalizado, como Huelva, que cuenta con nueve líneas y un coste de 11,5 millones de euros. La concesión en Jerez, con 16 líneas, es de 10 millones. «No estamos para hacer experimentos, hay que tener los pies en el suelo», insistió la edil.

Además, la municipalización conllevaría otra decisión más acerca de la plantilla: o que la asuma el Ayuntamiento con su convenio actual o despedirlos a todos «y eso no le gustaría a nadie». Con respecto a la primera opción, García-Pelayo dijo que los trabajadores de Urbanos Amarillos «tienen un convenio muy por encima del municipal y supondría un agravio comparativo para el resto de empleados».

Así, Pelayo insistió en que «no es una decisión que se deba tomar de un día para otro porque hablamos de un contrato muy importante» y destacó que «no vamos a someternos a la presión de nadie».

Con respecto al impago del canon, la alcaldesa quiso quitar importancia a la interposición de un recurso contencioso-administrativo: «Ellos utilizan los medios legales que tienen a su alcance», dijo.

Sigue la huelga

Mientras sigue la toma de decisiones en los despachos, los trabajadores de Urbanos Amarillas continúan con la huelga y ya van camino de completar tres semanas. El encuentro de ayer entre los representantes de la plantilla y la empresa no consiguió siquiera abrir hueco a la esperanza. «Seguimos sin cobrar y la empresa dice que no tiene capacidad para pagar hasta que no ponga dinero el Ayuntamiento», explicó el portavoz del comité, Ángel Morales.

Así, esta mañana volverán a manifestarse por el centro de Jerez en defensa de sus salarios -les adeudan junio, julio, la extra de verano y ya casi agosto- y solo circularán por la ciudad los servicios mínimos. «Estamos abiertos a escuchar pero no nos valen ya promesas, estamos cansados y escarmentados», dijo con amargura. Los representantes de la plantilla insistieron ayer una vez más en que radicalizarán sus protestas con otro tipo de acciones, como encierros, para demandar sus nóminas. «En mi casa siguen faltando los billetes», concluyó el trabajador.