Cuando la mitad del presupuesto se va en pagar nóminas

Uno de los principales lastres para la recuperación de los ayuntamientos es el enorme importe que hay que destinar a pagar las nóminas. Aparecen casos como el de Barbate, donde más del 70% de los ingresos se van en gasto de personal. Bornos también tiene una situación parecida, con un montante de 3,45 millones que salen de los 6,17 de los ingresos. Y el feudo socialista de la provincia, Alcalá de los Gazules, que destinó tres de los 7,3 de presupuesto a pagar a los trabajadores municipales.

Los Barrios también se encuentra con un tremendo gasto de personal con algo más de la mitad de las entradas económicas, así como La Línea, que necesita 39 millones para pagar a los empleados de la corporación. Y en este grupo se encuentra también Villamartín, que destina 6,7 de los 11,3 millones al gasto de personal.

Tras el recorte del 5% acordado por el Gobierno la primavera pasada, ese ahorro se comenzará a notar en la economía municipal, pero no será hasta que se presente la liquidación de 2010, que es la primera en la que tendrá aplicación esa medida. Y cabe la posibilidad de que el recorte sea absorbido por los nuevos préstamos que han sido necesario pedir para evitar caer en la bancarrota.