Nueva Rumasa pacta la presentación de un ERTE de seis meses en todas sus empresas

Nueva Rumasa suscribirá con los sindicatos UGT y CC OO un acuerdo global para aplicar expedientes de regulación de empleo (ERE) temporales, con reducciones de jornada o de suspensión de contratos por un máximo de seis meses, al que se podrán adherir los comités de todas las empresas que aún no han sido declaradas en concurso de acreedores.

Ésa fue la decisión que trasladaron ayer por la tarde los representantes de las dos grandes centrales sindicales a la asamblea de trabajadores de las bodegas de Garvey en el Marco de Jerez (Complejo Bodeguero Bellavista, Teresa Rivero, Zoilo Ruiz-Mateos y Bodegas Valdivia), así como a los de Royne, que se verán afectados por esta medida a excepción de la firma Vinícola Soto, cuya situación tampoco la llevaría a un concurso de acreedores.

Tal como explicó ayer el secretario de la federación agroalimentaria de CC OO en la provincia de Cádiz, Luis Páez, «hay que conocer bien las condiciones porque cada uno de los comités de empresa debe solicitar su adhesión a esta medida que, además, hay que ver si se concreta finalmente».

El acuerdo alcanzado a nivel nacional se pactó en una reunión con altos cargos de los ministerios de Trabajo y de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino y con responsables del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) en la que también se analizaron los mecanismos para agilizar el pago de los salarios que los trabajadores tienen pendientes de cobro, que los sindicatos cifran en más de seis millones de euros.

Tras el encuentro, el director general de Trabajo, Raúl Riesco, explicó que una vez se rubrique el acuerdo marco será validado por la autoridad laboral competente -Ministerio de Trabajo o comunidades autónomas-, mientras que en el caso de las empresas que se encuentren en suspensión de pagos (en estos momentos sólo Dhul) la decisión dependerá del juez correspondiente. «Los jueces de lo Mercantil van a ser sensibles para adoptar este tipo de medidas porque no perjudican a nadie», destacó.

En su opinión, las medidas del acuerdo favorecen tanto a la empresa, al permitirle no seguir incrementando sus deudas salariales, como a los trabajadores, que de este modo tendrán acceso a las prestaciones por desempleo, en tanto que «la deuda se puede canalizar hacia instituciones existentes en el sistema, como Fogasa», dijo.

«La empresa ha mostrado su disposición a reconocer impagos pendientes y facilitar la información que se necesita en las reclamaciones individuales ante el juzgado de lo social», apuntó.

Por su parte, los secretarios de Política Industrial de UGT y CC OO, Sebastián Serena y Jorge Tomé, respectivamente, explicaron que el acuerdo recogerá medidas «transitorias» para evitar que se produzcan extinciones de contratos y señalaron que los servicios jurídicos de ambos sindicatos redactarán hoy mismo un borrador que remitirán a la empresa con el propósito de ratificar un acuerdo cuanto antes.

Los dirigentes sindicales defendieron la urgencia de establecer un acuerdo marco, dado que «una vez que la situación se traslade a los jueces mercantiles no tiene cabida la negociación y hay más peligro» de llegar a ERE de extinción, al tiempo que confiaron en que, si el periodo de aplicación de los expedientes temporales es por un año, en este plazo «haya posibilidades de recuperar la actividad con los actuales empresarios o con otros».

Antes de este acuerdo se han pactado ERE temporales en dos plantas de Clesa y en la filial de Helados Royne, así como en Queserías Menorquinas.

Según los sindicatos, la dirección del grupo les ha trasladado que el 90 por ciento de las empresas con retrasos en los pagos a proveedores entrarán en concurso. El representante de CC OO reclamó a la dirección la acumulación de todos los concursos en un mismo juzgado para favorecer la gestión de los distintos procedimientos.

Por su parte, el consejero delegado de Nueva Rumasa, José María Ruiz Mateos, rechazó esta posibilidad y precisó que, de momento, está previsto solicitar esta semana el concurso para las cuatro bodegas que el grupo tiene en el Marco de Jerez y para Hibramer, con lo que se elevarán a diez las sociedades en suspensión de pagos (junto con Dhul, Carcesa, Clesa, Cacaolat y Queserías Menorquinas).

En el marco de la asamblea de ayer, los trabajadores de Garvey decidieron continuar con las movilizaciones actuales (concentraciones y cortes de carretera) que recrudecerán la próxima semana si no hay novedades que permitan mirar con optimismo el futuro.