Más de 160 gaditanos pillados con copas de más tras las cenas de empresa

Alcohol y volante volvieron a ser, por desgracia, el cóctel más peligroso de las pasadas fiestas navideñas para muchos gaditanos, que se lanzaron a la carretera con varias copas de más sin pensar en los riesgos. Es lo que se desprende de los resultados de la última campaña de la DGT de control de alcoholemia, que se llevó a cabo durante el periodo en que se concentran las cenas navideñas de empresa (del 13 al 19 de diciembre), ya que se trata de uno de los más peligrosos. En esas fechas, fueron multados 161 conductores gaditanos que superaron las tasas permitidas de alcohol en los múltiples controles que se realizaron tanto en carreteras como en vías urbanas. Y es que, además de la Guardia Civil de Tráfico, en la campaña participaron los policías locales de los municipios de Cádiz, Chiclana, Conil, El Puerto, Jerez, San Fernando, San Roque, Tarifa y Ubrique.

No en vano, el número de los que cogieron el coche después de beber fue mayor dentro de las ciudades (en vías urbanas hubo 127 sancionados), que los que cubrieron trayectos más largos (34 en vías interurbanas). Además de los multados por la vía administrativa, al menos 44 de los 161 infractores fueron detenidos ya que superaban los 0,6 miligramos de alcohol por litro de aire respirado, lo que se considera ya un delito contra la seguridad vial tipificado por el Código Penal.

Con todo, el número de gaditanos que se colaron con el alcohol en este tipo de cenas sigue siendo muy inferior a los que cogieron el volante sin haber bebido, ya que de las 5.681 pruebas que se aplicaron (la mayoría en carreteras), apenas un 2% resultaron positivas en alcohol, lo que en todo caso sigue siendo un porcentaje demasiado alto.